El concejal de Cs, Luis Zaragoza, en declaraciones a los medios, ha acusado al ejecutivo local de falta de compromiso pues, en septiembre de 2016, fue adjudicado un contrato menor para la redacción del proyecto de rehabilitación y actuación sobre la muralla y que, a día de hoy, se encuentra bloqueado.

"Creemos que la muralla puede ser de un interés indudable, pues es una gran desconocida y un patrimonio de este tipo necesita actuaciones de limpieza y adecuación", ha indicado Zaragoza, y ha añadido que se trata de un Bien de Interés Cultural y que podría tener un fuerte atractivo turístico en la ciudad "al igual que lo tiene la catedral o el prerrománico".

En nombre del grupo municipal, el concejal ha propuesto que se facilite el acceso a la muralla, así como la adecuación del camino, actualmente cubierto por vegetación y que se convierta en un paseo peatonal de libre acceso y en un espacio de recreo tanto para los ovetenses como para el resto de turistas.

Zaragoza también ha propuesto que "se fomente su inclusión en la ciudad a través de visitas guiadas, se elaboren de folletos informativos sobre la historia de la muralla para su uso turístico, así como la mejora de la señalización del monumentos y que se coloquen paneles informativos sobre su historia y valor".

La muralla medieval de Oviedo que data del siglo XIII, fue declarada Bien de Interés Cultural en 1931, y contaba en sus inicios con unos 1.400 metros de perímetro por 4 metros de alto y 2,20 de ancho. Actualmente tan sólo permanecen en pie fragmentos de la misma, situándose los más visibles en la calle Paraíso, el Postigo y en la Plaza de Riego y un trozo integrado en el convento de las Pelayas.