El cardenal arzobispo de Madrid, el cántabro Carlos Osoro, ha asegurado este martes en Santander que "es una gracia" de Dios que los Reyes de España, Don Felipe y Doña Letizia, visiten mañana Santo Toribio, con motivo del Año Jubilar, porque este hecho "destaca la importancia que tiene Liébana no solamente para Cantabria, sino para el mundo".

"En Liébana hay un mensaje fuerte que llega al corazón del ser humano. No es solamente una idea, es una propuesta de vida", ha asegurado Osoro en declaraciones a la prensa antes de inaugurar en la Universidad Internacional Menéndez Pelayo (UIMP) la 'IV Escuela de Humanidades, Metafísica y Mística Fernando Rielo. Retos para un nuevo humanismo. Pensamiento, arte y educación'.

También ha reconocido que Liébana "se ha empezado a conocer en los últimos años" y en este sentido ha recordado que en los 20 años que fue vicario general de la Diócesis de Santander, el lugar "estaba muy estropeado, no se le hacía mucho caso".

Al respecto ha destacado que la Cofradía de Santo Toribio ha sido "esencial" en su arreglo, y que los padres franciscanos que custodian el lugar, "lo han rehecho y han dado a conocer el tesoro que teníamos allí".

Además, el cardenal ve "con muchísima alegría" el aumento de visitas de peregrinos a Liébana, "entre otras cosas, porque es mi tierra, y por que tanta gente pueda ir a contemplar ese trozo, el más grande que existe y que se conserva" de la cruz en la que fue crucificado Jesucristo.

"La cruz significa una manera de vivir y de estar en el mundo, cosa que nos muestra nuestro Señor, y donde el arma del amor es lo más fundamental y lo más importante", ha manifestado Osoro.

En este sentido, ha reivindicado que "en el mundo en el que estamos, dividido y a veces roto, con grandes indiferencias de los unos a los otros, es importante que aparezca esa cruz que significa que la indiferencia no es la que hace falta en esta tierra para construir este mundo y para obrar el verdadero humanismo".