Agentes de la Policía Nacional han detenido y puesto a disposición judicial a R.M.M., de 20 años como presunto autor de un delito de pornografía infantil y corrupción de menores, al colgar en internet fotografías de una menor murciana que no atendió sus exigencias sexuales, informó hoy este cuerpo.

Las investigaciones de los agentes del Grupo de Delitos Tecnológicos de Murcia y del grupo II de Protección al Menor de la Brigada de Investigación Tecnológica de Madrid siguen abiertas para determinar el numero total de víctimas, cuyas fotografías pudieran haber sido difundidas por el detenido y posible red con la que pudiera estar conectado.

Localizaron la IP

Los agentes del Grupo de Delitos Tecnológicos de Murcia localizaron el IP del ordenador desde el que se emitió la fotografía insertada en Internet, así como su habitual usuario y domicilio, solicitando mediante exhorto judicial al Juzgado correspondiente de Madrid, la entrada y registro en el domicilio, y la intervención y examen del ordenador.

El modus operandi utilizado por el detenido es el conocido como "Grooming", o ciber-acoso infantil, consistente en ganarse la confianza del menor a través de Internet con el objeto de obtener fotografías de desnudos, eróticas o sexualmente insinuantes, ofertándole en contraprestación ropa de marca, dinero y viajes.

Conseguido lo anterior, los delincuentes solicitan los favores sexuales del menor, y caso contrario la amenazan o extorsionan con divulgar sus fotografías en los círculos de amigos, familiares y con colgarlas en páginas de Internet.

Tras esta inicial exigencia de favores sexuales para sí mismos, caso de aceptación de la víctima, extienden las exigencias al circulo inmediato, para finalmente introducirlos en la prostitución.

La joven murciana, al igual que otros jóvenes, en su habitual navegar por la red contactó con el "Messenger" del detenido, quien utilizando el ciber-acoso infantil o "Grooming", consiguió hacerse con la confianza de la menor, llegando incluso a utilizar como "gancho" el ser agente de modelos, alabando su físico y solicitándole fotografías, algunas de ellas desnudas.

Una vez conseguida las fotografías le solicitó sus favores sexuales a cambio de dinero o ropa de marca, amenazándola con colgar las fotografías en paginas de adultos de Internet si no accedía a sus deseos, cumpliendo su amenaza insertando una de las fotografías de la menor en una de dichas páginas.