La Delegación del Gobierno en Cataluña cree que el acto de este sábado de los alcaldes independentistas en apoyo al referéndum soberanista previsto por la Generalitat para el 1 de octubre "ha pinchado" y ha sido un "fracaso", entre otros motivos, porque ve "miedo" entre los ediles del PDeCAT a "prevaricar".

Medio millar de alcaldes catalanes, según datos de entidades municipalistas, han expresado este sábado su "compromiso" con el referéndum en un acto en el paraninfo de la Universidad de Barcelona, en que el presidente catalán, Carles Puigdemont, ha afirmado que el independentismo es el primer movimiento sociopolítico en España que va "de abajo hacia arriba", y ha avisado a los alcaldes: "Por eso sois importantes, por eso les molestáis y les dais miedo, y más que les daréis".

Fuentes de la Delegación del Gobierno en Cataluña han valorado este acto como un "fracaso" en su intención de hacer un gesto de fuerza del independentismo, un "pinchazo" de convocatoria que obedece al hecho de que la Generalitat "se niega a dar datos" exactos de quiénes son los que han acudido a la cita.

"Los alcaldes se niegan a firmar el documento que les compromete a incumplir la ley". "La mayoría de alcaldes del PDeCAT se niegan a prevaricar", añaden las fuentes.

Ya el viernes, el delegado del Gobierno en Cataluña, Enric Millo, dio instrucciones a las unidades de control de las subdelegaciones de la administración central para llevar a los tribunales a todos los ayuntamientos que promulguen decretos o aprueben en sus plenos la aplicación del manifiesto presentado este sábado por las entidades municipales independentistas, que prevé ceder locales para el referéndum del 1 de octubre.

De entrada, las fuentes consultadas recuerdan que en Cataluña hay 948 municipios, de los cuales 787 están inscritos en la Asociación de Municipios por la Independencia (AMI): CiU tiene 429 alcaldes, ERC 259 y la CUP 16. Entre los tres partidos tienen 704.

Según la AMI, sólo 500 personas han acudido a la cita de este sábado, sin especificar el número exacto de alcaldes —solo dos concejales de Badalona—, cuando si solo hubieran ido los que son secesionistas serían más de 700, con lo que sumado a diputados y miembros de los partidos la cifra hubiera sido muy superior, reflexionan las fuentes consultadas.

"Lo que pretenden hacer a partir de ahora es, durante esta semana y mediante presiones, buscar la adhesión del resto de ayuntamientos para vestir en la medida de lo posible un fracaso", han advertido las fuentes gubernamentales.