Tras pancartas en las que se exige un "empleo de calidad" y se rechaza la "pérdida de derechos laborales", los trabajadores han permanecido en la entrada principal de las Cortes donde se celebraba el Pleno de Presupuestos para trasladar a los grupos sus demandas, ya que se acercaron a conocer sus reivindicaciones miembros de todos los grupos con representación parlamentaria.

En concreto, los sindicatos reclaman el 5 por ciento que se les "robó" en 2012 como si fueran empleados públicos, algo que no son, así como una subida de un 2 por ciento en este año y el siguiente frente a un incremento igual a la subida del importe de la concesión en los presupuestos de la Junta, que estaría en torno al 3,8 por ciento.

La huelga general se ha convocado tras los paros de dos horas celebrados los días 5 y 12 de mayo que los sindicatos CC.OO y UGT han asegurado que tuvo gran seguimiento por parte de la plantilla, ya que entre incumplimientos de convenios, recortes y congelación los sindicatos cifran en un 21,7 por ciento la pérdida de poder adquisitivo y los trabajadores cobran entre 90 y 100 euros menos que en 2013.

Al paro están convocados cerca de 2.500 trabajadores del sector del transporte sanitario que tienen como principal reivindicación acercarse a la media salarial del resto de comunidades, ya que los sueldos de los empleados del sector en Castilla y León se encuentran a la cola en su cuantía, con diferencias de hasta casi 10.000 euros anuales (desde 16.300 de media en la Comunidad a los 26.000 de Guipúzcoa o Madrid).

Todo ello se produce además en un contexto en el que la empresa que cuenta con la concesión del transporte en ocho de las nueve provincias de la Comunidad (todas excepto Soria) obtiene beneficios y no quiere "poner un duro" encima de la mesa, han denunciado las fuerzas sindicales convocantes.