La entidad sin ánimo de lucro ha presentado este jueves la memoria del año pasado con el lema 'Siempre junto a las personas', en el que se engloba el trabajo realizado desde los diferentes programas sociales de Càritas Diocesana y las 68 Càritas parroquiales.

De las 7.885 personas acompañadas (un 17 por ciento menos respeto en 2015), desde Càritas han destacado el crecimiento del número de mujeres atendidas (61 por ciento), siendo principalmente personas jóvenes y adultas de entre 30 y 50 años las que se han acercado a los diferentes servicios de Càritas.

En cuanto al tipo de familia más del 45 por ciento han sido parejas con hijos; un 16,4 por ciento, familias monoparentales; y un 24 por ciento, personas solas.

Con una bajada significativa respecto de años anteriores de personas españolas (44 por ciento), un 51 por ciento son personas extracomunitarias (de más de 70 países).

En relación a su situación legal, la gran mayoría tiene una situación administrativa regular, a pesar de que un 12,4 por ciento están en situación irregular, un 1,4 por ciento se encuentran indocumentadas. Solo un 0,3 por ciento de las personas atendidas son persones refugiadas o en solicitud de asilo.

En cuanto a la formación, todavía un 14 por ciento de las personas atendidas se encuentra sin alfabetizar o sin acabar los estudios primarios y en cuanto a la situación laboral, el 64,4 por ciento son personas activas, de las cuales el 57,6 por ciento se encuentran paradas y un 5 por ciento trabajan.

La directora de Càritas Mallorca, Margalida M. Riutort ha destacado que a lo largo del 2016 se ha detectado que un aumento de lugares de trabajo no ha impedido las dificultades de acceso a la vivienda, que la entrada de un sueldo en los hogares familiares no ha sido suficiente para afrontar todos los gastos y que a pesar de la disposición de acogida de gran parte de la sociedad hacia los refugiados, se continúan dando situaciones de rechazo hacia muchos de emigrantes.

ACCIONES

En cuanto a la intervención realizada por Càritas, se han dado más de 35.000 respuestas a las diferentes demandas realizadas, siendo los ámbitos prioritarios la cobertura de necesidades básicas (45 por ciento); la investigación de trabajo y los procesos de inserción sociolaboral (34 por ciento); el apoyo en la educación (33 por ciento) y el apoyo a la vivienda (17 por ciento).

En relación al apoyo en busca de trabajo, se han acompañado a 1.522 personas (13 por ciento menos que en 2015) desde los diferentes proyectos de Formación (304), Talleres Prelaborals (75), Orientación laboral (1.146) e Intermediación (407).

A pesar de todo, han detallado, la precariedad laboral no ha dejado de estar presente, puesto que algunos de los contratos han estado de corta duración, a jornada parcial e incluso combinando diferentes trabajos a la vez.

Esta situación de precariedad laboral y los ingresos insuficientes de las personas y familias atendidas ha comportado que el apoyo a las necesidades básicas para vivir con dignidad haya continuado siendo numeroso llegando al 29 por ciento en ayudas directas en alimentación e higiene, un 26 por ciento en ayudas por vivienda y un 5 por ciento en ayudas para la educación.

INGRESOS

Respecto a los ingresos totales del ejercicio 2016, la memoria expone que han aumentado un 8,5 por ciento respecto del año anterior, hasta los 3.467.883 euros.

Los ingresos de las actividades propias han representado un 67 por ciento del total (52 por ciento el 2015) a causa sobre todo, del aumento de las donaciones de particulares, disminuyendo el peso de los ingresos de la administración pública (de un 32 por ciento en 2015 a un 23 por ciento en 2016) y el de las colaboraciones con instituciones privadas (de un 16 a un 10 por ciento).