En este sentido, gracias a una información de la Policía Local de Arrecife, la Guardia Civil obtuvo el posible paradero del animal, procediendo el 12 de junio, y previa autorización judicial, a la entrada y registro en la vivienda sospechosa.

Los agentes encontraron allí al cocodrilo en cuestión, y en virtud a las diligencias policiales de robo descritas y al artículo 20.1 de la Ley 1/1998 de Protección de Animales del Gobierno de Canarias, el animal ha sido intervenido cautelarmente y depositado en otro parque zoológico de la isla a la espera de la resolución de las diligencias policiales descritas.

Por su parte, la tenencia de esta animal, incluido en el Catálogo Cites -Convenio sobre el Comercio Internacional de Especies Amenazadas de Fauna y Flora Silvestres-, está permitida solamente bajo circunstancias excepcionales, ya que además de ser una especie protegida es un animal potencialmente peligroso, por lo que ha de estar ingresado en un establecimiento habilitado como núcleo zoológico.