En declaraciones recogidas por Europa Press, Fernández Carriedo ha explicado que el acuerdo para el plan social entre empleados y compañía que permita poner en marcha el plan industrial es el cuarto punto que falta para poder asegurar la continuidad de Nissan en Ávila, después de que hasta el momento se hayan logrado "otras tres positivias", como el que la Alianza Renault-Nissan haya puesto sobre la mesa el citado plan industrial; que la multinacional haya delegado la responsabilidad de las negociaciones en una persona "que ha demostrado su compromiso con Castilla y León", como es el presidente de Renault España, José Vicente de los Mozos, y que la Junta contribuya a este plan a través con apoyo económico para inversiones y para formación y recapacitación de los trabajadores de cara a la nueva actividad de la planta como fábrica de componentes.

Por ello, ha invitado a las partes a poner "su mejor disposición para el acuerdo" y ha advertido de que lo que se decida no sólo afectará a los trabajadores del presente, sino para Ávila y Castilla y León durante los próximos años.

"Hemos asegurado financiación Junta para poner en marcha ese plan industrial, ahora los protagonistas son ellos, deben poner lo mejor de sí mismos para lograr un acuerdo", ha insistido el consejero, quien se ha mostrado "consciente" de los "esfuerzos" que se piden a las partes, pero ha recordado que "la peor de las opciones sería el cierre".