Según informa el Instituto Armado en un comunicado, la investigación se inició a raíz de la denuncia de una persona que había suspendido en varias ocasiones las pruebas para la obtención del permiso de conducción tipo B que aseguraba haber sido estafada.

Al parecer, cuando se encontraba en su lugar de trabajo, se le acercó un desconocido que se identificó como examinador y le ofreció obtener el permiso a cambio de 410 euros, mientras hablaba por su teléfono simulando mantener conversaciones con personal funcionario de Tráfico, tras lo que la víctima se convenció y le entregó parte del dinero.

Según la Guardia Civil, al cabo de unos días recibió un documento con sus datos en el que decía que había aprobado el exámen teórico, lo que animó a la víctima a entregarle el resto del dinero para supuestamente obtener el carné. Posteriormente, cuando reflexionó, decidió denunciar los hechos a la Guardia Civil.

La investigación de la Guardia Civil de Carmona (Sevilla) permitió determinar que el documento que le entregaron a la víctima es en realidad un impreso de solicitud que está disponible al público, así como que los datos de la víctima no constan en la Jefatura de Tráfico entre los aprobados. Finalmente se consigue identificar al presunto autor de la estafa, M.C.A., y a otro individuo, F.L.A., al que se investiga como colaborador.

Al primero, detenido recientemente y que no tiene relación alguna con la Jefatura Provincial de Tráfico, se le atribuyen los presuntos delitos de estafa, falsedad documental y usurpación de identidad, mientras que al segundo se le imputa el delito de estafa en calidad de investigado. Según la Guardia Civil, se trata de personas con antecedentes policiales por varios delitos y también han estafado en otras localidades de la comarca.