Los hechos sucedieron el mes pasado. Un empleado del salón de juegos observó cómo uno de los clientes, que se encontraba jugando a la ruleta electrónica, se levanto de forma brusca y golpeo con el puño la máquina de azar.

Esta conducta sorprendió al trabajador, por lo que recriminó dicha actitud al jugador, que abandonó precipitadamente el local, según ha explicado la Policía Nacional en una nota.

Tras estos hechos, el empleado se aproximó a la mesa de juego y comprobó que la pantalla de la ruleta electrónica estaba fracturada.

Por estos hechos interpuso una denuncia en la Comisaría de Policía Nacional de Tudela, valorando los daños ocasionados en más de 600 euros y aportando las grabaciones de los hechos, que habían sido registradas en el sistema de seguridad del local.

A raíz de la denuncia presentada, los investigadores de Policía Nacional practicaron las diligencias pertinentes y consiguieron identificar al presunto autor de los daños, procediendo a su localización y posterior detención, elaborando el correspondiente atestado, que fue remitido a la autoridad judicial competente.