'CELA: literatura y arte. La pintura a través de Papeles de Son Armadans', puede verse en la Sala Municipal de Exposiciones de Las Francesas desde este lunes y hasta el próximo 9 de julio.

A la inauguración de la exposición ha acudido Camilo Cela Conde, hijo del Premio Nobel gallego, quien ha señalado la "ingente" labor de criba de los fondos que poseía su madre y que, hasta su exhibición en Valladolid, formaban parte de su "vida cotidiana".

La muestra se organiza en torno a tres ejes que son Picasso, Miró y el grupo El Paso y, "más allá de la certificación que hagan los expertos", representa "una manifestación de amistad".

Para Cela Conde, lo que se preveía como una revista "destinada al fracaso", se convirtió en un referente de vanguardia con colaboraciones de figuras del arte que participaron "sólo porque se lo pedía Camilo José Cela".

En este sentido, el hijo del escritor de Iria Flavia (La Coruña) ha destacado que actualmente no existe nada similar y ha achacado a esto su fama. "Tal vez nos maravilla porque no somos capaces de llegar ahí", ha indicado en declaraciones recogidas por Europa Press.

'PAPELES DE SON ARMADANS'

Camilo José Cela, Premio Nobel de Literatura 1989, fue el fundador y director de 'Papeles de Son Armadans'. El nacimiento y desarrollo de esta revista estuvieron unidos a la presencia del escritor en la isla de Palma de Mallorca durante más de treinta años.

La comisaria de la muestra, María Toral, ha subrayado el carácter "pionero" de esta revista, en plena década de los 50, con aportación de artistas españoles desde el exilio, al tiempo que ha puesto a la exposición como una forma "diferente" de conocer a Cela y acercarse a una "faceta desconocida" del autor.

Se trataba de una publicación gestada en Mallorca pero con vocación de cruzar sus fronteras. En enero de 1956, la edición ya contaba con la participación de colaboradores suficientes para su primer número. Entre ellos, figuraban Gregorio Marañón, Alonso Zamora Vicente, José María Castellet, José María Moreno Galván, Dámaso Alonso, Carles Riba, Rafael Sánchez Ferlosio y Ricardo Gullón.

Su fundador comenzó a entablar una relación estrecha con intelectuales locales y de la península. La ambición de Cela con este proyecto literario se materializó en varias decisiones. Así, por un lado, ofreció sus páginas a escritores españoles exiliados, como Rafael Alberti, Max Aub, Emilio Prados o Luis Cernuda. Por otro, apostó por dar cabida a textos en las tres lenguas vernáculas peninsulares, así como a autores que publicaban en inglés.

Asimismo, 'Papeles de Son Armadans' acogió la obra de insignes artistas plásticos, entre ellos, Joan Miró, Pablo Picasso, Antoni Tàpies o los integrantes del grupo El Paso.

Estas colaboraciones surgidas del acoplamiento entre literatura y arte se vieron completadas con la publicación de algunos libros como Joan Miró. Dibujos y litografías o Gavilla de Fábulas sin amor. Ilustraciones de Picasso, fruto del trabajo conjunto entre el pintor malagueño y Cela.

GRUPO EL PASO

'Papeles de Son Armadans' dedicó al grupo El Paso su número 37, que recogía cuatro dibujos infantiles inéditos de Picasso, sendas dedicatorias de Miró y Escudero, e ilustraciones de los integrantes de El Paso, además del manifiesto definitivo del grupo, que se publicaba aquí por vez primera.

Los versos nacidos en las Conversaciones Poéticas de Formentor fueron también difundidos por la revista, en forma de poemas ilustrados por el propio Cela y por Canogar, Millares, Tàpies, Saura o Viola, con portada de Miró.

Entre las anécdotas que guardan la relación de Cela con estos artistas, su hijo ha señalado la ocasión en que los guardas de la villa 'La Californie' que Picasso tenía en Cannes (Francia), le negaron la entrada y sólo la intervención del fotógrafo personal del pintor -que estaba lavando el coche en ese momento- le salvó de quedarse en la calle.

En otra ocasión, y harto de la demora de Joan Miró para responder a las preguntas de una entrevista que deseaba publicar en 'Papeles de Son Armadans', Camilo José Cela se inventó las respuestas con el beneplácito del artista, enemigo de entrevistas, el cual pretendió que Cela respondiera también las cuestiones que, meses después, pretendía hacerle el medio norteamericano 'The New York Times'.

Un hueco especial en la muestra tiene el pintor del grupo El Paso Manuel Viola, el cual recurría a menudo a suplantar a otros artistas cuyo estilo y firma copiaba, aunque "nunca falsificaba cuadros ya pintados", si no que creaba nuevas composiciones cromáticas "a la manera de ellos".

Así, Cela poseía un falso Miró obra de Viola que destruyó cuando el primero negó su autoría, a lo que el artista barcelonés respondió con un reproche: "¿Qué has hecho? Podrías haberlo vendido". También Viola pintó un falso Chagall que Cela envió al pintor francés para que éste lo certificara. La pintura, con el escrito de Chagall en el que da fe de su falsedad, es otra de las piezas reunidas en la muestra.