Los sospechosos, cuatro hombres y dos mujeres a los que se les imputa un delito de tráfico de drogas, se desplazaban a cualquier punto del municipio para entregar la droga en los domicilios de sus cliente. Esta actividad ilícita era su principal medio de vida.

Los consumidores que preferían ir al punto de venta directamente, podían hacerlo durante las 24 horas del día, bien accediendo ellos a las propias viviendas o bien bajando los detenidos a la vía pública para realizar los pases.

Asimismo, los detenidos realizaban tanto la preparación de la droga como su venta en presencia de sus propios hijos, de corta edad. Incluso, llegaban a realizar el corte de la droga, para disminuir su pureza, con el mismo polvo de las papillas, que servían también de alimento para los niños.

Agentes de la Benemérita efectuaron cinco registros en las viviendas de los ahora detenidos, en los que intervinieron 420 dosis de cocaína, 10.300 euros en efectivo, tres turismos y un arma blanca, entre otros.

Las investigaciones se iniciaron a raíz del aumento significativo en las denuncias por infracciones administrativas por tenencia de sustancias estupefacientes en la localidad, cuyo nexo en común eran las viviendas sociales sitas en la barriada de la Sagrada Familia.

Durante esas semanas, la Policía Local de Xixona también había identificado a uno de los implicados cuando llevaba consigo 20 gramos de cocaína, dosificados para su venta.

En colaboración con la Guardia Civil de Crevillent, los agentes culminaron la investigación la semana pasada con los registros domiciliarios y la detención de los presuntos autores, tres hombres españoles de 66, 32 y 28 años, un marroquí de 37 y dos jóvenes españolas de 32 y 27 años.