El decano y presidente del Colegio de Economistas de Valladolid (Ecova), Juan Carlos de Margarida, ha abogado por una cadena de valor en el sector agroalimentario en la que todas las partes tengan poder negociador y ha alertado de la "atomización" de empresas que existe en Castilla y León.

Durante la presentación del II Observatorio de Agroalimentario de Castilla y León que elabora su organización, De Margarida ha subrayado la buena marcha del sector, el cual es "determinante" y "estratégico" para la economía de Castilla y León, tanto por su peso económico como en el empleo, con productos "de altísimo nivel" con "tradición y experiencia".

En declaraciones recogidas por Europa Press, el presidente de Ecova ha apostado por potenciar las sinergias con la gastronomía, el turismo o la enología, con capacidad para "aumentar la producción".

Sin embargo, entre los problemas a que se enfrenta el sector, Juan Carlos de Margarida ha advertido de la "fuerte atomización" de empresas, lo que repercute en "bajos márgenes" y una productividad "menor" que la media de la Unión Europea.

Este tamaño, además, dificulta la capacidad de las empresas de ofrecer formación a sus trabajadores, lo que se une a la "poca mentalidad empresarial" en el campo concreto de la agricultura y la ganadería, al tiempo que se genera "poco valor añadido" y se deja "escaso poder negociador" a los productores debido a este reducido tamaño.

A esto se suma, según ha recordado el decano de los economistas vallisoletanos, la "problemática poblacional" de Castilla y León, la cual "se acentúa en el medio rural", y una falta de financiación acorde a las peculiaridades de las explotaciones, que requieren "grandes inversiones iniciales" y "no ofrecen una rentabilidad inmediata".

Asimismo, hacen falta "más infraestructuras de transformación y comercialización", junto con un relevo generacional en las explotaciones, más apoyo a jóvenes agricultores y ganaderos, mayor desarrollo rural con una apuesta por los emprendedores y políticas que favorezcan el asentamiento de inmigrantes en estas zonas.

COOPERATIVAS

Para el presidente de Ecova, las explotaciones deberían "buscar la rentabilidad por sí mismas" y no depender de subvenciones, mientras que las cooperativas habrían de "mejorar su gobernanza" y crecer en tamaño, con una mayor apuesta por la internacionalización y un incremento de la competitividad y la productividad.

En el caso de la industria agroalimentaria, ha subrayado las "posibilidades" que ofrece un sector "tan dinámico y cambiante" en un mercado en el que "el 85 por ciento de los productos que se consumen son transformados" y "sólo el 15 en fresco". En este sentido, ha abogado por una "mayor conexión" entre productores, industriales y consumidores en materia de I+D+i, a fin de que este último eslabón pueda transmitir a los otros dos "qué es lo que quiere".

En cuanto a la cadena de valor, ha reclamado una mayor estabilidad frente a los actuales "altibajos", con un aumento del poder negociador de cada uno para que todas las partes "ganen un margen de beneficio". También ha advertido de la necesidad de "adelantarse" al mercado en el desarrollo de nuevos productos y aumentar la formación de los recursos y de favorecer la digitalización y desarrollo tecnológico en pleno auge de la denominada industria 4.0.

Juan Carlos de Margarida ha defendido la conveniencia, dentro de la estrategia de internacionalización, de volcarse en el mercado asiático, un terreno "prácticamente virgen" en el que se ha desarrollado una clase media "cada vez con mayor poder adquisitivo".

No obstante, ha recalcado que en esa estrategia de cara al exterior es preciso mantener la proyección de los productos castellanoleoneses "como garantía de calidad", lo cual protegería al sector de circunstancias como el Brexit. Sobre este punto, ha vaticinado que la agroalimentación será la "menos perjudicada" de la economía de la Comunidad por la salida de Reino Unido de la Unión Europea, dada su "alta calidad" y el hecho de que se trata de "productos de lujo" en el país británico.

El decano de los economistas de Valladolid se ha referido al proyecto de Parque Agroalimentario para la capital, una infraestructura "importante" para el sector de la Comunidad, si bien ha advertido de la conveniencia de que estos proyectos tengan un crecimiento "pausado, sólido y constante" con un tamaño "no muy grande" en lugar de aparecer "de golpe" y con una superficie desmedida sin saber la demanda que habrá de los mismos.