Según recuerdan, el año pasado denunciaron que los proyectos "distaban de dirigirse a rebajar la carga ambiental del turismo en Baleares" y, por el contrario, "sirvieron para suplir la falta de financiación de la Conselleria de Medio Ambiente, en relación a déficits de las infraestructuras hidráulicas con el pretexto de la sequía".

Además, señalan que de los proyectos adjudicados en 2016 "no hay ningún tipo de información disponible y actualizada en la web" sobre su estado de ejecución y tampoco tienen "constancia de que el Govern esté haciendo seguimiento de las inversiones".

Asimismo, desconocen, tal como han remarcado, qué ha pasado con la recaudación definitiva de 2016 que asciende a más de 40 millones de euros, "de los que solo se hizo propuesta de adjudicación por 30 millones".

Por esto, consideran que se deben "redefinir" los objetivos del impuesto turístico y el modo en que se adjudican sus fondos. Además, han querido remarcar que estos dos factores fueron los que supusieron su voto en contra a la propuesta de adjudicación de los primeros 30.000.000 de euros provenientes de la recaudación del impuesto turístico.