Según informa la Junta de Andalucía en un comunicado, este dispositivo de ecografía portátil, cuya inversión asciende a 19.843 euros, consta de dos sondas para el diagnóstico por la imagen de las diferentes patologías. Una sonda es abdominal y permite aplicar el Protocolo FAST, dirigido a pacientes politraumatizados. Su objetivo es identificar la presencia de líquido libre intra-abdominal y se lleva a cabo en el área de Emergencias o Críticos en apenas dos minutos.

Por otro lado, dispone de una sonda cardiaca que permite aplicar el Protocolo RUSH. Está dirigido a pacientes críticos en shock, los cuales en ocasiones es difícil desde el punto de vista clínico diferenciar el patrón predominante. En cambio, esta sonda contribuye a identificar patrones de shock o colapso circulatorio y así establecer de forma inmediata un mejor tratamiento y seguimiento inicial.

Además, este dispositivo permite detectar causas de patologías graves, tales como la disfunción ventricular en el infarto agudo de miocardio, así como la presencia de líquido en cavidades como el pericardio y la zona pleural. También, esta nueva tecnología posibilita la localización exacta del lugar de punción para que la evacuación del líquido genere menos riesgos y sea más segura.

Según el jefe de Urgencias del hospital ursaonés, Antonio Rojas, "las aportaciones del nuevo equipamiento son notables, dado que nos permiten agilizar diagnósticos, descartando hemorragias abdominales, en pericardio o pulmón; y también nos ayudan a tomar decisiones urgentes, tales como la intervención quirúrgica urgente".

La adquisición de este ecógrafo portátil forma parte del proceso de renovación tecnológica y modernización de técnicas diagnósticas que se está realizando en el Hospital de Osuna.

Como señala su directora gerente, Francisca Díaz Alcaide, "esta actuación se suma a la reciente adquisición de nuevos ecógrafos en Urología y en Radiología, con la dotación de un nuevo mamógrafo de contraste que mejora la precisión en la detección del cáncer de mama". Además, también se han incorporado monitores en las sala de reanimación para el control de la evolución de los pacientes y su centralización en un monitor único.