Según ha informado la asociación este sábado, el hallazgo ha sido trasladado al Seprona para que la Guardia Civil inicie la investigación de la autoría de este vertedero, compuesto principalmente por residuos de obras y reformas de albañilería.

Arco Iris ya denunció hace un mes la localización de otro vertedero en el término municipal de Carral (A Coruña). Entre los escombros de este basurero se encuentran varios documentos que podrían arrojar información sobre los responsables.

Así las cosas, los ecologistas han vuelto a reclamar la creación de un número de teléfono gratuito para que la ciudadanía pueda denunciar "de forma rápida y anónima" estos vertederos clandestinos y otros "atentados contra el medio ambiente".

"Es la Xunta de Galicia la que tiene la obligación de asumir este reto, de bajo coste pero enorme rentabilidad social que, sin duda, ejercería un efecto disuasorio sobre quienes carecen de la más mínima conciencia ambiental y usan el patrimonio natural colectivo como un vertedero particular", ha manifestado.

En relación a esto, Arco Iris ha recordado que las máximas penas previstas en el Código Penal por este tipo de delitos pueden alcanzar hasta los 30.000 euros de multa.