Las 25 horas del curso son exigibles por normativas como el Real Decreto 1311/2012, de 14 de septiembre y el Decreto 79/2015, de 28 de abril y han estado dirigidos a aplicadores que realicen tratamientos con productos fitosanitarios que sean gases clasificados como tóxicos, muy tóxicos, o mortales, o que generen gases de esta naturaleza.

El carné de fumigador acredita que los alumnos, en su "inmensa mayoría" cultivadores de tabaco y trabajadores del sector, han adquirido los conocimientos apropiados para aplicar en sus explotaciones productos fitosanitarios fumigantes de suelos que son imprescindibles para el desarrollo de este cultivo, explica la Junta de Extremadura en nota de prensa.

Todo ello con "garantía de respeto" a la seguridad del medio ambiente, salud de usuarios y trabajadores y salud de los transeúntes.

Para obtener el carné de fumigador es condición necesaria haber adquirido previamente la capacitación correspondiente a los niveles básico o cualificado de aplicador de productos fitosanitarios.

Las materias principales que componen el curso son el correcto mantenimiento de los equipos de aplicación, conocer la peligrosidad y los riesgos de éstos productos, elementos de protección a la hora de aplicarlos, prácticas para una correcta aplicación, primeros auxilios en caso de intoxicación, entre otras.

También se han realizado tres cursos en la comarca de Gata (Moraleja y Riolobos) con 77 alumnos asistentes, y en la segunda quincena de abril se prevé la realización de tres cursos más con unos 75 alumnos.