El parlamentario de Elkarrekin Podemos Julen Boian ha reprochado al PNV y al PSE-EE que hayan optado por aprobar los Presupuestos de este año con el PP, un partido "antisocial" y que, según ha dicho, se ha vendido "barato" en Euskadi para lograr un "cambio de cromos" que le permita aprobar los Presupuestos Genrales del Estado (PGE) en el Congreso de los Diputados.

Boiain ha destacado este martes, en el debate definitivo sobre los Presupuestos de Euskadi que se celebra en el Parlamento vasco, que cada vez existe una mayor "complicidad" entre el Gobierno autonómico (PNV-PSE) y el PP.

El representante de Elkarrekin Podemos ha lamentado que las Cuentas que se aprobarán este martes son fruto de la "entente neoliberal" que sellaron esos tres partidos con su acuerdo presupuestario. Boiain ha censurado que 'jeltzales' y socialistas hayan optado por sacar adelante el proyecto presupuestario pactando con "el partido más antisocial de esta Cámara".

"NI PRINCIPIO NI FINAL"

Boiain ha criticado que el Parlamento vaya a dar "luz verde" a unas Cuentas que no resuelven las "necesidades" de los ciudadanos más afectados por la crisis económica, algo que se producirá porque el Partido Popular ha optado por "vender barato su voto" en Euskadi.

El parlamentario de Elkarrekin Podemos ha vinculado el acuerdo sobre las Cuentas vascas con la negociación entre el Ejecutivo central y el PNV sobre los PGE. De esa forma, ha advertido de que el pacto entre el Gobierno autonómico y el PP "no tiene ni principio ni final en Euskadi", puesto que "a la vuelta de la esquina" se presenta un "cambio de cromos" sobre los Presupuestos Generales del Estado.

CIUDADANÍA "CONDENADA"

Boiain ha reprochado al gabinete de Iñigo Urkullu que haya buscado su "estabilidad" a cambio de apoyar "a la derecha española" en el Congreso de los Diputados, lo que "condenará a la precariedad y a los recortes" no sólo a los ciudadanos de Euskadi, sino a los de "todo el Estado".

Por otra parte, ha asegurado que las Cuentas se encuentran "hipotecadas" desde su mismo origen por unos insuficientes recursos económicos, lo que -según ha dicho- evidencia que es necesario reformar la política fiscal para dotar de mayores ingresos a las administraciones.

También se ha referido a la decisión del Gobierno autonómico de no incrementar la Renta de Garantía de Ingresos (RGI) de acuerdo al ocho por ciento de subida aplicada en el Salario Mínimo Interprofesional (SMI).

Boiain ha criticado esta decisión, y ha recordado que la propia ley que regula la RGI establece que la "referencia" para el cálculo de esta prestación ha de ser el SMI. Asimismo, ha reclamado que se revierte el recorte del siete por ciento que se aplica desde 2012 en la cuantía de esta prestación social.