El Ayuntamiento de Barcelona ha aprobado definitivamente la ordenación singular de los alrededores de la Sagrada Familia, que no admite terrazas en las aceras de su perímetro, ha informado el consistorio en un comunicado este sábado.

La medida pretende resolver las disfunciones causadas por el uso intensivo del espacio público por parte de los visitantes del templo y proporcionar una ordenación correcta del espacio ocupado por las terrazas.

Los criterios seguidos para elaborar la regulación han sido garantizar el flujo de peatones, el paso de vehículos de emergencia y servicios, así como preservar el disfrute visual y la visión de los edificios de concurrencia pública y comercial.

Con la aplicación de las medidas no se admitirán terrazas en las aceras de los perímetros del templo y los chaflanes de los cuatro cruces, excepto del de Sardenya con Provença, y se establece una acera libre de 4,5 metros en la ruta que componen las paradas de autocar habilitadas para visitar la basílica.

Según el consistorio, el sector de restauración tiene una presencia importante en la zona regulada, con 49 locales con terraza, y, según estos criterios, se reducirán hasta 56 mesas y 224 sillas, donde actualmente hay 89 mesas y 336 sillas.

En el mes de mayo, el Ayuntamiento instalará seis plataformas desmontables en la calle Sardenya para ubicar las terrazas del entorno de la Sagrada Familia y aumentar el espacio público para los peatones.