Es la primera que se acomete en la última década, según ha explicado el alcalde de Cuenca, Ángel Mariscal, quien ha avanzado que la intervención incluye reposición de hormigón y de barandillas o bancos.

En declaraciones a los medios en el transcurso de su visita a la zona, Mariscal ha agregado que se trabajará a lo largo de dos kilómetros de una ruta "muy transitada por conquenses y visitantes, más aún en fin de semana" gracias a una iniciativa "muy necesaria" y que, además, permitirá a la ruta "ganar en seguridad y atractivo".

Por su parte, el gerente de Tragsa en Cuenca, Pedro Díaz, ha detallado que el proyecto cuenta con un presupuesto aproximado de 5.900 euros y un plazo de ejecución de una semana y contempla la retirada de sedimentos de todas las salidas de agua para evitar inundaciones, el desbroce de todos los tramos estrechos para facilitar el tránsito, así como la realización de un trazado integral de todos los puntos o el hormigonado de 70 metros lineales al inicio del tramo, donde hay más pendiente y se colocarán también unos pequeños escalones para facilitar el acceso a la ermita.

El secretario de la Hermandad de San Julián El Tranquilo, Carlos Soria, ha recordado la pertinencia de dicha actuación sobre un tramo que recibe a muchos excursionistas a lo largo del año, ya que, según sus cálculos, "al mes son unas quinientas personas las que pasan por aquí, con excursiones cada dos o tres días".