Los Mossos d'Esquadra y la Policía Nacional han detenido a 18 miembros de una organización criminal especializada en robos en domicilios de Cataluña que se desplazaba en transporte público, han informado ambos cuerpos este martes en un comunicado.

La investigación comenzó en octubre de 2016 cuando los agentes tuvieron constancia de un robo con fuerza perpetrado en Terrassa (Barcelona) por tres personas, que fueron identificadas como integrantes de un grupo de origen georgiano ubicado en el distrito barcelonés de Sant Martí y que actuaba en el área metropolitana de Barcelona, las comarcas barcelonesas del vallès Occidental y el Baix Llobregat y la ciudad de Madrid.

La investigación constató que el grupo de ladrones se había separado formando otros grupos con personas reclutadas en organizaciones que se habían deshecho, tanto en Cataluña como en otras ciudades del Estado, de Europa o que habían venido directamente desde Georgia, aunque compartían información y se intercambiaban herramientas e integrantes.

Los Mossos supieron que la organización había enviado un grupo a Madrid, donde ya habían realizado varios robos, por lo que crearon un equipo de trabajo conjunto con la Policía Nacional, que abortó un robo y detuvo a cuatro personas que ingresaron en el CIE de Madrid.

En la banda había un grupo dedicado a visitar los posibles objetivos que asaltarían para hacer un estudio de la puerta de entrada de la finca, el número de vecinos que había por escalera, la situación de las puertas de cada planta y la marca de las cerraduras, tras lo que colocaban marcadores en función del grado de vulnerabilidad de cada vivienda.

Otro grupo se dedicaba a la vigilancia de la zona seleccionada desplazándose al lugar el día del robo y observando mientras otros entraban al edificio para comprobar qué pisos estaban vacíos en ese momento, tras lo que otras personas abrían la puerta y consumaban el robo.

Los miembros de la organización criminal se desplazaban casi siempre en transporte público y usaban el tren hasta poblaciones del área metropolitana -especialmente Terrassa y Sabadell-, mientras que el fin de semana iban en Metro a robar en Barcelona.

Los Mossos d'Esquadra desplegaron un dispositivo policial el 27 de febrero para desmantelar a cuatro grupos ubicados en el área metropolitana y se realizaron ocho entradas y registros: seis en Barcelona, uno en L'Hospitalet de Llobregat y otro en Sant Adrià del Besòs (Barcelona).

A los 18 arrestados se les atribuyen 46 robos con fuerza: uno en Cornellà de Llobregat, uno en Vic, dos en Badalona, 11 en Barcelona, 13 en Sabadell, 15 en Terrassa (Barcelona) y tres en Madrid.

El operativo detuvo a 17 personas de nacionalidad georgiana -siete en Barcelona, cuatro en Sabadell, dos en Hospitalet y cuatro en Madrid- y en una segunda fase se detuvo a otra persona de origen armenio a la que el grupo vendía gran parte de los objetos robados.

Los arrestados pasaron a disposición del Juzgado de Instrucción 12 de Barcelona, que ha decretado el ingreso en prisión para 16 de los detenidos -entre ellos el receptor de los objetos- y el reingreso en el CIE de Madrid de otro.