El director de Kukuxumusu, Ricardo Bermejo, ha afirmado que la sentencia que impide a Mikel Urmeneta la reproducción de dibujos del Universo Kukuxumusu "ha clarificado las reglas del juego entre una empresa y un dibujante" y ha servido para demostrar que "los contratos que se firman entre una parte y la otra sirven para algo".

Además, Bermejo ha señalado que es "muy perverso" afirmar que la sentencia penaliza la creatividad y ha destacado que los contratos que han dado base a la resolución judicial son los que "Mikel Urmeneta -ahora en la empresa Katuki Saguyaki- hizo firmar a los dibujantes". "Los contratos que tenemos para utilizar los dibujos son gracias a que Mikel Urmeneta se los hizo firmar a los dibujantes y ahora los derechos de explotación comercial son de la marca Kukuxumusu. Urmeneta antes estaba en posición de empresario y ahora se pone en frente, es un postureo", ha indicado.

Al margen del conflicto judicial, Bermejo ha asegurado que Kukuxumusu tiene un futuro "positivo" y está trabajando en "nuevos proyectos y nuevas líneas de dibujos, hay una evolución creativa, acercándonos a lo que se supone que quieren nuevas generaciones de 'millennials".

"Estamos haciendo estudios de mercado, repensando la marca, intentando tener más fortaleza comercial. Tenemos un plan de internacionalización. Tenemos puertas abiertas en México. Estamos en ese plan de relanzamiento y las críticas de Urmeneta no nos vienen bien, debería dedicarse a hacer sus dibujos. Tiene talento creativo y no necesita copiar", ha indicado, en una entrevista con Europa Press.

Ricardo Bermejo ha valorado que la sentencia ha permitido "clarificar las reglas de juego entre una empresa y un dibujante". "Este medio está muy atomizado, mucha gente trabaja en su casa, ni siquiera se le hace un contrato, y por eso Urmeneta está encontrando apoyo, porque son personas sin mucha defensa, autónomos, y las empresas a veces abusan de ellos", ha destacado.

Además, ha asegurado que Kukuxumusu "siempre ha confiado en la justicia". "Los contratos que se firman entre una parte y la otra sirven para algo. Hay que cumplirlos, estamos sujetos a la ley de propiedad intelectual. Si los contratos no sirven, todo el mundo de la edición se pone en cuestionamiento, algo que afectaría a ilustradores, diseñadores, novelistas o periodistas", ha afirmado.

Según Bermejo, Urmeneta "quiso situar el debate entre un empresario y unos pobres ilustradores que están indefensos, pero se ha dado cuenta por la sentencia que los contratos valen para algo". "Urmeneta hizo que todos los derechos posibles se cedieran a la marca", ha destacado, para precisar que "los dibujantes han cobrado por ceder esos derechos".

Además, Bermejo ha afirmado que si Mikel Urmeneta siguiera comercializando los dibujos que la sentencia reconoce sólo a Kukuxumusu haría "flaco favor a sus clientes, porque nosotros estaríamos obligados a denunciar".

El director de Kukuxumusu ha reconocido que este conflicto "ha sido muy desagradable" y ha afectado "a la reputación corporativa de la empresa". "No pega mucho que en Kukuxumusu hablemos de temas judiciales y demandas, Kukuxumusu es más divertido, lo que nos gusta es hacer que la gente se divierta", ha indicado.

En cualquier caso, Ricardo Bermejo ha asegurado que "el futuro de la empresa es positivo, hay un plan de viabilidad, hemos recuperado la confianza de inversores y clientes, que estaba muy deteriorada". "Cuando yo entré en la empresa en 2014, Kukuxumusu había pasado por siete ERE, había despedido a un 70 por ciento de la plantilla, y si yo no entro en Kukuxumusu ahora no existiría", ha sostenido.

Ha reconocido no obstante que la crisis económica sigue percipiéndose y el mercado "está triste". "Está parado, no acaba de tirar para adelante, pero estamos con entusiasmo", ha indicado.