La Policía Nacional ha detenido en Pamplona, Soria y Madrid a nueve personas y se ha incautado de 1,9 kilos de cocaína procedente de la República Dominicana, parte de la cual había sido escondida por sus padres en la canastilla de la silla de paseo de un bebé de diez meses.

Las investigaciones se iniciaron a comienzos de año, al detectarse la entrada de cocaína en la Comunidad Foral a través de "mulas" o "correos". La policía averiguó que en Soria iba a tener lugar una transacción de droga entre una persona desplazada desde Pamplona y otras tres personas, un hombre y un matrimonio con un bebé de diez meses en una silla de paseo que viajaban en el autobús de la línea Madrid-Soria.

En el momento en el que el presunto comprador de la droga contactó con estas personas, se realizó un cacheo y se encontró en el ajuar del bebé una bolsa de plástico que contenía 960 gramos de cocaína, envasada en paquetes de diez gramos que estaban mezclados con un producto de alimentación para camuflar el olor de la droga.

La operación policial permitió asimismo detener a otras dos personas en Madrid y desmantelar, en Pamplona y en la capital española, dos laboratorios clandestinos en los que se incautó 140 gramos más de cocaína. El pasado día 25 se detuvo a otras tres personas en Pamplona, dos hombres y una mujer, a los que se intervino 767 gramos de cocaína.

En total, los agentes se han incautado de 17.200 dosis de cocaína (1,9 kilogramos), valoradas en unos 103.000 euros. De los arrestados, con edades comprendidas entre los 22 y los 42 años, ocho son dominicanos residentes en Madrid (5), Pamplona (2) y Huesca (1), mientras que el noveno es un español residente en la capital navarra.

Los detenidos fueron puestos a disposición judicial y ocho de ellos ingresaron en prisión, mientras que el bebé de diez meses ingresó en un centro de observación y acogida del Gobierno de Navarra, lo que supone, ha afirmado el delegado del Gobierno, "todo un drama por la clamorosa insensatez de sus padres". En este sentido, Riga ha asegurado que utilizar "un bebé-mula" es "una práctica particularmente deleznable, escalofriante".

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