No obstante, según se desprende del último Boletín de Coyuntura Económica de la CROEM, recogido por Europa Press, también anotaron una evolución negativa semimanufacturas (-58 millones, un 4,2% menos), materias primas (-24,7 millones), bienes de equipo (-20,6) y componentes de automóvil (-3,3).

Esta debilidad fue contrarrestada por la fortaleza de las exportaciones alimentarias (+326 millones, +7,6%) lideradas por frutas, hortalizas y legumbres (+119), productos cárnicos (+99), preparados alimenticios (+35), grasas y aceites (+23) y productos pesqueros (+19).

En menor medida contribuyen manufacturas (+38,9) como calzado (+14,9) y textil (+5,7); y bienes de consumo duradero (+13,9), principalmente mueble (+12,6).

Por áreas geográficas, el mayor socio comercial no energético de la Región de Murcia en 2016 fue de nuevo Alemania (931 millones) con un aumento importante de 30 millones, seguido por Reino Unido (915, que suponen 10 más que en 2015), Francia (865; +79) e Italia (442; +9,3), algunos de ellos sujetos a notables incertidumbres políticas y económicas que podrían afectar a medio plazo a la economía murciana.

Por lo que, según CROEM, habrá que profundizar en la diversificación de destinos, como ha ocurrido el último año con Bélgica (+33 millones en exportaciones no energéticas), Libia (+25), Egipto (+24), Irán (+23), Sudáfrica (+23) o Polonia (+23).

Finamente, al igual que las exportaciones, las importaciones registraron una notable caída (7.959 millones, -11,2%) por el descenso del valor de los bienes energéticos (-23% o -1.241 millones de euros), frente al dinamismo de semimanufacturas (+47 millones), bienes de equipo (+22) y manufacturas de consumo (+21).

De este modo, se alcanzará un superávit comercial de 1.055 millones, mayor al de un año antes (414).