En una rueda de prensa, el concejal ha expresado que "cualquier noticia de movilización de los trabajadores es muy preocupante", de modo que, según ha agregado, "las administraciones debemos estar muy encima de la situación".

En este sentido, ha apuntado que "a nadie se le escapa que es una gran empresa", si bien ha comentado que "los últimos datos conocidos no afectan a la actividad de la empresa y así lo han dicho sus responsables".

No obstante, ha resaltado que hay que "tener muy claro que la inversión también implica creación y mantenimiento del empleo", a la vez que ha declarado que para el PP es "prioritario el mantenimiento del empleo en Córdoba".

Al respecto, Fuentes ha indicado que "hay que estar muy pendientes del proceso, vigilar por la situación de los trabajadores y que no se pierdan muchos puestos de trabajo", porque "la situación ya es bastante delicada como para tener que desgajar aún más una industria agroalimentaria en Córdoba".

Entretanto, el edil ha señalado que "no se puede cambiar el modelo productivo" a través del Boletín Oficial de la Provincia (BOP) o el Boletín Oficial de la Junta de Andalucía (BOJA), sino que "hay que ser suficientemente atractivos para la inversión, pero también para la creación de empleo", ha recomendado el popular.

En concreto, los sindicatos CCOO, UGT y CSIF han decidido iniciar un calendario de movilizaciones a partir de este viernes para mostrar su rechazo al ERE, que recoge 56 bajas en la fábrica de la barriada periférica de Alcolea, en la capital cordobesa, 30 puestos de trabajo en Rivas (Madrid) y nueve en Andújar (Jaén).

Igualmente, se plantea el cese de la actividad y externalización de las áreas de Refinería y Vinagres, así como de Salsas del centro cordobés, si bien "es cierto que también se contempla la creación de 32 puestos de trabajo nuevos en el centro de Rivas, a los que podrían optar las personas afectadas por el ERE", según han explicado los sindicatos recientemente.

CUENTAS DE LA EMPRESA

Cabe señalar que Deoleo ha cerrado con pérdidas de 179 millones de euros en 2016 tras registrar en sus cuentas un deterioro patrimonial de 96,3 millones de euros para acometer la reestructuración en la que está inmersa la firma, así como por el impacto ocasionado por el cambio de normativa fiscal.

Al respecto, la entidad ha cifrado en 53,3 millones de euros el impacto que ha tenido el cambio en la normativa fiscal que se produjo en diciembre de 2016. Este cambio en la tributación del Impuesto de Sociedades ha llevado a la multinacional a incurrir en causa de disolución.