En el primer discurso que Donald Trump ha dado ante el Congreso como presidente de EE UU, un numeroso grupo de representantes y delegadas demócratas han acudido vestidas de blanco. Esta ha sido su forma de homenajear al movimiento en favor de los derechos de las mujeres surgido a principios del siglo XX, según informa CNN.

"Vamos de blanco para unirnos contra cualquier intento por parte del Gobierno de Trump de hacer retroceder el increíble progreso que las mujeres han conseguido en el último siglo", explicaba la congresista por Florida Lois Frankel.

"Los demócratas nunca nos retiraremos de la lucha para proteger el acceso a una asistencia médica asequible, los derechos reproductivos, la igualdad de salarios, el permiso familiar y tantas cosas más. ¡No retrocederemos!", ha escrito Frankel en su cuenta de Facebook.

Aunque más simbólica, esta nueva protesta contra el presidente estadounidense se une a las marchas de mujeres que se han celebrado en todo el mundo desde que el magnate neoyorkino fuera elegido. Esas movilizaciones surgieron del impulso feminista de un grupo de jóvenes ante las acusaciones contra Trump por supuestos abusos sexuales y contra los denigrantes comentarios que ha hecho sobre las mujeres.