Así lo ha postulado el a su vez cardenal arzobispo de Valladolid para ayudar al colectivo de refugiados y tratar de paliar la tragedia que viven todos ellos, impulsados, como así ha advertido, a huir de sus respectivos países "arriesgando sus vidas hacia un destino desconocido".

Blázquez, invitado de honor en el Foro Económico de El Norte de Castilla, donde ha desmenuzado el documento 'Iglesia como servidora de los pobres', aprobado en abril de 2015 por la Conferencia Episcopal y referido a la crisis económica, ha reclamado la apertura en España de un corredor humanitario, al estilo del puesto en marcha en Roma desde febrero de 2016 por la comunidad católica San Egidio, con la ayuda de la Federación de Iglesias Evangélicas y la Iglesia Valdense, que ha permitido acoger hasta la fecha a cerca de 700 personas.

El prelado, en declaraciones recogidas por Europa Press, se ha mostrado a favor de estos corredores humanitarios al considerar que la atención a este colectivo es una "cuestión mayor" en este momento histórico y ante las dudas que le suscita si el conjunto de los países de la UE está resolviendo bien el problema. "Da la impresión de que nos estamos quedando por debajo de la cuerda", ha lamentado Blázquez.