Según una nota de prensa de la Comisaría gijonesa, la víctima iba cargada con bolsas a bordo de un autobús urbano, y en una de las maniobras en las que el bus realizó un frenazo brusco, una de las viajeras se apoderó de su bolso de mano, aprovechando la circunstancia de que a

la dueña del mismo se le habían caído varios productos y estaba recogiéndolos.

Meses después de esta sustracción, la denunciante fue informada de que debía 986 euros del uso realizado con la tarjeta de un supermercado que ella nunca había tramitado. A partir de esta notificación, los agentes pudieron averiguar que, usurpando su identidad, se había solicitado la tarjeta de supermercado a nombre de la denunciante y además se había tramitado una tarjeta adicional a nombre de otra mujer, anexa a la misma cuenta bancaria.

Los investigadores comprobaron que la mujer a la que correspondía la tarjeta adicional tenía antecedentes policiales y era quien había realizado las compras en supermercados de Montevil y Pérez de Ayala por valor de casi 1.000 euros. Esta fue localizada el pasado día 21 y detenida como supuesta autora de usurpación de identidad, hurto y estafa.