El juez instructor de la Audiencia Nacional Ismael Moreno además de rechazar prohibir el acto, destacó este jueves en un auto que no ve que este homenaje incurra en un delito de enaltecimiento del terrorismo. Asimismo, indicó a los denunciantes la posibilidad de poder formular una nueva denuncia ante el juzgado de instrucción territorialmente competente.

Esta fue la respuesta a la denuncia presentada este martes por la asociación y el sindicato policial ante la Audiencia Nacional en la que pidieron la prohibición del "acto de reconocimiento y reparación de las víctimas por actos de motivación política provocados por grupos de extrema derecha o funcionarios públicos", al entender que se puede llevar a la realización de "acciones coercitivas" hacia los miembros de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad, enaltecimiento del terrorismo o humillación a las víctimas.

En este sentido, un día antes de la celebración del acto, la Asociación Dignidad y Justicia y el Sindicato Profesional de Policía vuelven a pedir su prohibición. En un comunicado conjunto, los denunciantes subrayan su compromiso con las "auténticas víctimas del terrorismo" y con las Fuerzas y Cuerpo de Seguridad del Estado.

Así, recalcan que los agentes de la Policía y Guardia Civil son los "verdaderos héroes en la lucha contra ETA", por lo que aseguran que no dejarán de denunciar "este tipo de celebraciones independientemente de las trabas judiciales" que encuentren. Por último, lamentan que con el "dinero de todos los navarros" se realicen actos que, a su juicio, forman parte "del ideario etarra y su red de apoyo", en referencia a que sea el Gobierno foral el que convoque.

REESCRIBIR LA HISTORIA

Según expresaron los denunciantes en la denuncia presentada en la Audiencia Nacional, este acto trata de "reescribir la historia" al asemejar a los asesinatos de ETA con las "represiones violentas de índole política" y humillar a las víctimas del terrorismo equiparándolas con asesinos que perdieron la vida en enfrentamientos armados con los cuerpos policiales.

"Que por la esencia de los convocantes y el lema de la convocatoria todo hace pensar que es un acto ideado para injuriar y calumniar a las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad, especialmente a la Policía Nacional y la Guardia Civil, equiparando sus acciones legítimas a las de actos terroristas", afirma la denuncia. Tienen la finalidad de expulsar a los policías del País Vasco y Navarra, "identificándose con una de las reclamaciones históricas de la organización terrorista ETA", apostilla.

Los denunciantes aportaron también una noticia en la que se explica que "el Ejecutivo trata de igualar a las fuerzas y cuerpos de seguridad del estado con los grupos violentos de extrema derecha".