El plenario del congreso nacional del PP ha tumbado, por solo 25 votos de diferencia, la enmienda de un compromisario de Cuenca contra la acumulación de cargos que hablaba explícitamente del caso de la secretaria general, María Dolores de Cospedal.

Según fuentes "populares", el plenario, que debate la tarde de este viernes la ponencia de estatutos, ha rechazado la enmienda de Francisco Risueño, compromisario del municipio conquense de San Clemente, por 328 votos en contra, frente a 303 a favor y ocho abstenciones.

La enmienda de Francisco Risueño era la única que hablaba de forma explícita del caso de Cospedal, que además de secretaria general es presidenta regional del partido, ministra de Defensa y diputada, aunque había otras muchas sobre el régimen de incompatibilidades.

La mayoría de estas enmiendas -eran varias decenas- decayeron antes de llegar al congreso, aunque a mediados de semana, según fuentes "populares" todavía quedaban aproximadamente unas diez.

En lo que va de debate se ha rechazado también, además de la de Risueño, otra enmienda que reclamaba que en ningún caso se desempeñe más de un cargo territorial de presidente o secretario general ni que a éste se acumule más de un cargo institucional, autonómico o nacional.

La enmienda que el PP sí ha aceptado finalmente ha sido la del dirigente madrileño Iñigo Henríquez de Luna que defiende promover la separación y limitación "gradual" de la acumulación de cargos del partido y del Gobierno.

Fuentes populares han confirmado a Efe la inclusión en la ponencia de esta enmienda que recoge una declaración de intenciones en ese sentido.

"Promoveremos una gradual separación y limitación en la acumulación de cargos institucionales de gobierno y orgánicos del partido", rezaba el texto original de esta enmienda que se dio a conocer ayer, cuando Henríquez de Luna anunció el acuerdo con el coordinador de la ponencia, Fernando Martínez-Maillo, para incluirla.

Aunque desde la dirección 'popular' se aseguró ayer, poco después de ese anuncio, que la negociación no estaba cerrada, este viernes finalmente se ha aceptado el texto de Henríquez de Luna tal y como se había dado a conocer.

Así, los responsables de la ponencia se han puesto en contacto con Iñigo Henríquez de Luna para anunciarle que finalmente la enmienda se aceptaba, por lo que no ha requerido ni siquiera de votación por parte del plenario.