La Generalitat catalana y la valenciana han criticado que el Estado use fondos destinados al corredor mediterráneo para hacer obras en Madrid. En concreto, el acceso sur del AVE para duplicar las líneas que entran a Atocha y el túnel de Chamartín. Unos trabajos que suben a casi 1.000 millones de euros y que se incluyen dentro de un documento que la Moncloa ha hecho llegar a la Unión Europea, donde se recogen los proyectos asociados al corredor mediterráneo.

Tanto el secretario de Obras Públicas del gobierno valenciano, Josep Vicent Boira, como el de Infraestructuras catalán, Ricard Font, critican que al estado español el corredor mediterráneo "tenga dos ramales" –el que resigue la costa y el de Madrid– y que la ejecución de las obras se haga a dos velocidades.

Por su parte, Font lo ejemplifica diciendo que, mientras Madrid quiere conectar Barajas con el ancho europeo, todavía no se sabrá cuando el ibérico (es decir, Cercanías) llega hasta el aeropuerto del Prat.

Josep Vicent Boira ha sido quién lo ha hecho público, a través de un documento de trabajo que Europa hizo público el diciembre pasado. Se recoge el listado de proyectos que hacen referencia al corredor mediterráneo. Critica que lo que sobra es que junto con proyectos como el Castelló-Tarragona, aparezcan también el túnel entre Chamartín y Atocha o el tendido del ancho europeo hasta la terminal de Barajas.

El secretario de Obras Públicas considera que este es un ejemplo más del "Madrid siempre gana" y de la concepción radial de las infraestructuras. "La realidad es que hoy el corredor mediterráneo tiene dos ramales; uno que es el que resigue el litoral, y la otra, que conecta Algeciras con Madrid", lamenta el secretario valenciano.

"La realidad es, pues, que obras asociadas estrictamente a la capital del Estado se paguen con fondos destinados al corredor mediterráneo", afirma Boira. Y para poner cifras, el secretario de Obras Públicas recuerda lo que cuesta el acceso sur del AVE para duplicar las líneas que entran a Atocha (pasando de dos a cuatro) y el túnel de Chamartín: 935 millones de euros.