El proyecto, recordémoslo, ha implicado la demolición de la antigua piscina cubierta del recinto público, para construir un aparcamiento subterráneo con casi 200 plazas, dos piscinas climatizadas, una sala de fitness y cuatro pistas de pádel que explota la citada empresa privada, tras haber invertido unos 13 millones de euros en la actuación.

A cambio de la financiación de las obras, la empresa disfruta de la gestión y explotación económica del aparcamiento y las nuevas instalaciones deportivas, si bien los precios máximos están establecidos en los pliegos publicados por parte del Ayuntamiento a la hora de ofertar la mencionada concesión administrativa.

El proyecto, recordémoslo, se remonta al mandato municipal 2007/2011, cuando el socialista Alfredo Sánchez Monteseirín gobernaba la ciudad con el apoyo de IU-CA. No obstante, las obras no arrancaron hasta el ocaso del siguiente mandato, el del popular Juan Ignacio Zoido, pues los suelos de la antigua piscina municipal pertenecen a la Junta de Andalucía, había expirado la cesión de los suelos al Ayuntamiento y fue necesario negociar una nueva concesión por 40 años.

Y ya el pasado viernes, tras una inversión de unos 13 millones de euros, el nuevo centro deportivo gestionado por la empresa Supera ha comenzado a funcionar, según informa la citada compañía a través de su página web y las redes sociales.