El Salón Noble del Cabildo de Tenerife ha acogido este miércoles el acto de recepción de 14 jóvenes titulados de la isla que esta semana parten a Marruecos y Cabo Verde para realizar prácticas profesionales no laborales

en empresas durante cinco meses con cargo al programa 'Becas África-Empresas'.

En concreto, se trata de 11 chicos y tres chicas, de los que ocho parten a Praia (Cabo Verde) y el resto a Agadir (Marruecos), y en total hay cinco ingenieros civiles, dos ingenieros de construcción, un ingeniero industrial, un ingeniero eléctrico y otro de procesos especializado en química, un diseñador gráfico, un administrativo, una arquitecto y un técnico de marketing y publicidad.

Los beneficiarios del proyecto recibirán una ayuda de 500 euros brutos al mes y han recibido un programa formativo sobre interculturalidad y mejora de idiomas, aparte de que los gastos de viaje, alojamiento, permisos y seguros, están cubiertos.

Daniel, ingeniero de Edificación, ha asegurado, por ejemplo, que se ha sumado al programa porque el sector de la construcción en Canarias está "parado", hasta el punto de que arriesga porque deja su trabajo en la isla.

Además, está convencido de que esta experiencia le puede abrir un "hueco" en el mercado laboral y es una forma de "justificar" el coste de sus estudios.

Su compañero Ángel, ingeniero civil, cree que este paso forma parte de un proceso de "madurez" que le permitirá "profesionalizarse" aún más en el extranjero para abrir "otras puertas", al tiempo que podrá ver "como se hacen las cosas de otra manera".

La consejera de Acción Exterior, Delia Herrera, ha admitido que ha sido "difícil" encontrar jóvenes interesados en el programa porque la gente está "más mentalizada" para ir a Europa cuando, en su opinión, deben concienciarse de que hay "más oportunidades" en África.

"Está muy arraigada la tradición de ir a Europa, hay que hacer un giro y mirar a África y abrir la miente, ya que ver donde están las grandes potencias como Estados Unidos, China, Francia o Reino Unido, África es el continente del futuro", ha detallado.

EL USO DEL FRANCÉS, UNO DE LOS PROBLEMAS

Herrera, que ha confesado que en el futuro vivirá en algún país africano, ha señalado que en 2017 se van a aumentar los fondos del programa, potenciando el aprendizaje de idiomas y abriendo las prácticas a administraciones públicas.

El consejero insular de Empleo, Leopoldo Benjumea, ha señalado que el gran "problema" para captar becarios, aparte de la reticencia a viajar a África, ha sido el francés, y a modo de recomendación, les ha pedido a los jóvenes que sean "comedidos" las experiencias y "tengan cuidado", porque aunque son países seguros, son diferentes a España.

Para ser beneficiarios de las líneas de becas, los jóvenes debían ser residentes en la isla al menos durante los dos últimos años, tener menos de 30 años, haber concluido los estudios en 2010 o posterior, y estar en situación de desempleo.