Una iniciativa propia para huir de la polarización del debate en torno al secretario general de Podemos, Pablo Iglesias, y el secretario político, Íñigo Errejón, de cara a la II Asamblea Ciudadana estatal del partido, que se celebrará del 10 al 12 de febrero. Eso es lo que pretenden la secretaria de Ánalisis Político y Social, Carolina Bescansa, miembro del equipo cercano a Iglesias, y el secretario de Economía, Nacho Álvarez, considerado próximo a las tesis de Errejón pese a que nunca lo ha proclamado públicamente.

Ambos han lanzado este miércoles su proyecto Colectivo Mayo 2011-Pensando Podemos, pensado exclusivamente para  "tender puentes" entre todos los sectores de la formación y recoger propuestas para Vistalegre II, que para muchos tiene un carácter refundacional. Se trata, dicen, de abrir el debate al resto de la organización con vistas a pactar entre todos "las reglas de juego" que regirán tras tan importante cónclave.

El partido asistirá a la cita prácticamente partido en dos, como puso de manifiesto el referéndum interno que Iglesias convocó en diciembre sobre las reglas del congreso y en el que, por primera vez, confrontaron el número uno y el número dos. Ganó la propuesta del líder, pero por la mínima, y ahora, a las puertas de una negociación para tratar de alcanzar un pacto entre ambos sectores que evite la confrontación total en la Asamblea, se producen movimientos entre algunos dirigentes en un intento de "oxigenar" el debate. En este sentido, Bescansa, que forma parte de la plataforma 'Podemos para Todas' que Iglesias presenta en Vistalegre II, admite que el resultado de dicha consulta ha debilitado a Podemos y subraya que "no se puede asumir una Asamblea Ciudadana" donde los temas "sean desplazados por un debate permanente de 140 caracteres". "Un país no se dirige a golpe de tuit", ha añadido Álvarez al respecto.

Ambos dirigentes han augurado que del congreso saldrán las mismas "mayorías y minorías" que hay ahora, con independencia de si se presenta una lista o varias, que eso no les debe convertir en rivales, y que van a tener que acordar mecanismos para convertir la diversidad en un caudal de fuerza, por lo que hacen un "llamamiento a la responsabilidad. Así, apelan a llegar a acuerdos sobre los "temas y normas fundamentales" de organización para garantizar la cohesión del partido, que necesita prepararse para ganar las elecciones. Ambos critican, además, que se hayan planteado unos documentos ya elaborados y después se haya informado de ellos, en lugar de abrir un debate previo de recogida de propuestas y buscar "acuerdos" antes.

Ese es el objetivo de la herramienta que han anunciado este miércoles: que todo el mundo, independientemente de que se identifique más con una u otra corriente o dirigente, pueda proponer ideas, como se hizo en su primera Asamblea Ciudadana de 2014. En el caso de que los principales equipos que compiten en este proceso -los de Iglesias, Errejón y los anticapitalistas- rechacen integrar estas propuestas en sus documentos o llegar a un acuerdo conjunto en base a ellas, los impulsores del denominado colectivo Mayo-2011 no descartan llevarlas al papel y presentar también documentos propios. "Nuestros esfuerzos van a estar centrados en que estas propuestas se integren en el resto de documentos pero si se niegan, algo que vemos poco probable, valoraremos la posibilidad de presentar documentos propios", ha explicado Álvarez. Eso sí, han señalado que no aspiran a elaborar listas propias a la dirección.

La iniciativa de Bescansa, anunciada hace una semana, ha extrañado a muchos errejonistas, que lo consideran un movimiento cuanto menos "llamativo", dado su alineamiento hasta ahora con el secretario general.

No ha sido el único. El exsecretario general de la Comunidad de Madrid, Luis Alegre, personal y políticamente unido a Iglesias y alejado de la primera línea política, sorprendió este martes a propios y extraños al publicar un artículo en el Hufftington Post en el que defendía algunas de las tesis de Errejón.Lo firma, además, junto a  uno de los representantes del proyecto del número dos en el equipo técnico que organiza la Asamblea.

Alegre, en cuyo mandato se produjo la cascada de dimisiones en Podemos Madrid por discrepancias con su gestión que acabó con la destitución como secretario de Organización de Sergio Pascual, aboga en su tribuna por pensar en los que están "afuera", como dice el número dos, y por equilibrar la acción social y la institucional, al tiempo que reclamar tomar la iniciativa política. Es, por otro lado, muy cercano a Tania Sánchez, que llegó a Podemos de la mano de Iglesias pero que el otoño pasado se unió a la candidatura de Rita Maestre, afín a Errejón, para disputar el control de Madrid a la candidatura próxima al secretario general, liderada por Ramón Espinar.