Lamborghini Aventador S, el primer modelo de producción con dirección en las cuatro ruedas

Este vehículo es la versión más potente y actualizada del Aventador de 2013. Recibe cambios en el chasis, la carrocería y el sistema de tracción total. Como principal novedad, destaca su sistema de dirección en las cuatro ruedas y un motor de doce cilindros en uve que da 740 caballos.

El sistema de dirección es muy eficaz a baja velocidad y en cambios de trayectoria como al girar entre topes de volante. A poca velocidad, las ruedas giran en sentido contrario al de las delanteras para mejorar la agilidad. A alta velocidad, las ruedas giran en el mismo sentido para aumentar la estabilidad lineal. Este sistema funciona de forma parecida a los utilizados por el Renault Talisman o el Porsche 911.

Hemos llevado el Aventador S por circuito y carretera a un ritmo alto, aunque ni mucho menos al límite que permite este coche. En todo momento hemos sentido que podríamos haber ido más rápido sin correr riesgo. Es un vehículo que transmite seguridad y cuyas ondas mecánicas llegan sin apenas filtro al habitáculo.

Su puesto de conducción es muy bueno, aunque las piernas no van tan estiradas como en un Porsche 911 Turbo S. En la posición más baja de la banqueta no se tienen los glúteos tan cerca del suelo como puede pasar en el Porsche mencionado.

En carretera a ritmo normal, con el modo de conducción STRADA seleccionado (el menos deportivo), la suspensión no es incómoda, aunque sí firme. El sonido del motor está siempre presente y puede restar algo de confort escucharlo continuamente. En ciudad su circulación es algo tosca. Los baches y los cambios de marcha hacen que recibamos pequeñas sacudidas en todas direcciones.

Según la marca, su principal competidor es Ferrari y en un nivel "algo por debajo" McLaren. Algunas alternativas al Aventador S  y su motor superior a 700 CV son el Ferrari F12berlinetta o el McLaren 675LT.

El Aventador S cuenta con el sistema Start&Stop para reducir su consumo (según los datos que se pueden consultar en su ficha técnica, su consumo medio es de 16,9 l/100 km, su consumo extraurbano es de 11,6 l/100 km y su consumo urbano es de 26,2 l/100 km). En cuanto a su aceleración, es capaz de pasar de 0 a 100 km/h en 2,9 segundos y su velocidad máxima alcanza los 350 km/h.

Respecto al exterior, su carrocería es 17 mm más larga que la del Aventador. Estrena paragolpes delantero y trasero, alerón posterior y difusor. El chasis no ha cambiado, es el mismo que el del Aventador, fabricado en fibra de carbono. Los neumáticos son Pirelli P Zero, "específicamente diseñados para el Aventador S".

Hay cuatro modos de conducción en el Aventador S: Strada, Sport, Corsa y Ego (nueva denominación para el modo personalizable). Los modos más deportivos reparten más potencia atrás.

En el interior (imagen arriba), el Aventador S ha cambiado su instrumentación, que se muestra a través de una nueva pantalla TFT; estrena el sistema multimedia (ahora actualizado y con conectividad con Apple CarPlay); y, de forma opcional, se puede incluir el sistema de telemetría Lamborghini, que informa sobre distintos parámetros del vehículo y la conducción durante el manejo en circuito. Este vehículo también cuenta con el programa Ad Personam, con el que se puede personalizar el habitáculo gracias a una extensa variedad de materiales, tapicerías y colores.

Debido a que el Lamborghini Aventador S es un modelo muy peculiar, las aseguradoras no ofrecen un precio en línea de una póliza a todo riesgo. Salvo excepciones como ésta, el precio del seguro de la mayor parte de los modelos del mercado se puede consultar en nuestro comparador de seguros.

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