La Policía afgana ha informado este martes que el trabajador del Comité Internacional de la Cruz Roja (CICR) secuestrado el lunes en el norte de Afganistán es español y que está en marcha una operación para tratar de liberarlo lo antes posible. Fuentes diplomáticas españolas también han confirmado que está "retenido".

"Es español y fue capturado en la aldea de Hussain-Khil, en la provincia de Kunduz", afirma el portavoz de la Policía de Kunduz, Mahfuzullah Akbari, quien agregó que todavía no han identificado a los captores. El portavoz añadió que aunque "las fuerzas de seguridad han retomado la operación de rescate", desconocen a dónde se pueden haber llevado al cooperante. "La finalidad del secuestro aún no está clara", concluyó Akbari.

Varios cooperantes del CICR fueron interceptados uando viajaban en dos coches por la autopista que une las ciudades norteñas de Kunduz y Mazar-e-Sharif, dijo un portavoz de la ONG, Ayaz Ahmad Ramin. "Al resto de nuestros compañeros les permitieron marcharse y ahora el CICR está en contacto con autoridades de diferentes niveles y fuentes para asegurar la liberación del secuestrado", detalló Ramin.

Sayd Mahmoud Danish, portavoz del gobernador de Kunduz, asegura que la Cruz Roja no compartió con ellos la nacionalidad del secuestrado, pero que les informaron de que éste "era conocido entre sus amigos como Carlos". Al parecer, la familia del cooperante ya ha sido informada de lo sucedido.

La vicepresidenta Soraya Sáenz de Santamaría ha afirmado que el Gobierno está trabajando para tratar de liberar al cooperante, pero también ha pedido "sigilo" para que las actuaciones lleven "a buen puerto". También Cruz Roja Española trabaja "minuto a minuto" con el CICR. "Estamos en contacto directo con el Comité Internacional para que la situación termine lo antes posible", dice el responsable de Inmigración, José Javier Sánchez Espinosa.

El pasado febrero, cinco empleados afganos del Comité Internacional de la Cruz Roja fueron secuestrados en la provincia de Ghazni, en el sureste del país, y liberados poco tiempo después. Los secuestros son comunes en Afganistán y los empleados de organizaciones humanitarias son a menudo objetivo de este tipo de acciones, en muchos ocasiones destinadas a obtener un rescate.

Cruz Roja Española tiene unos ochenta cooperantes destinados en más de cuarenta países —18 países de África, 12 de América, cinco de Asia, tres de Europa y tres de Oriente Próximo— un equipo al que se unen otros españoles que trabajan para el Comité Internacional de la Cruz Roja (CICR).

Cincuenta y siete españoles han sido secuestrados en los últimos veinte años mientras participaban en labores humanitarias, incluido el secuestrado este lunes en Afganistán.