El ciudadano rumano de 50 años que el pasado mes de agosto raptó a su hijo de dos años mientras le hacía una visita en un centro de la Diputación fue detenido ayer por la Ertzaintza en Getxo.
Florin fue arrestado cuando se disponía a cobrar la ayuda de los servicios sociales de la que era perceptor y ha sido ingresado en prisión bajo una fianza de 10.000 euros. Hasta el momento, el detenido se ha negado a desvelar el paradero del pequeño Andrei.
Sin embargo, la madre del niño, Cristina, de 23 años y también de nacionalidad rumana, tiene "ligeras sospechas" de donde puede estar. "Mi madre está en Rumanía buscándolo junto a la policía de allí", señaló a 20minutos.es.
Siete semanas sin su hijo
El pasado 29 de agosto, Florin aprovechó la visita que le hizo a su hijo Andrei en un punto de encuentro para las parejas separadas de la Diputación de Vizcaya para llevarse a su hijo. Inmediatamente, la Ertzaintza sospechó que había podido huir del país.
Este hecho fue confirmado semanas después por la madre del pequeño, quien confirmó a este periódico que su ex pareja se había puesto en contacto con ella desde Rumanía y le había permitido hablar con su hijo.
Poco después, la policía tuvo indicios de que Florin se encontraba en la localidad rumana de Tulcea, y solicitó la correspondiente orden de búsqueda internacional.
Asimismo, los agentes de la Ertzaintza pudieron comprobar que el acusado era perceptor de una ayuda de los servicios sociales de Getxo y esperó a que viniera a recoger su prestación. Y así ocurrió en la mañana de ayer.
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