La finalización de la vendimia, el alargamiento turístico balear y el efecto ánimo por la reactividad económica son los tres motivos esgrimidos por el Gobierno para explicar las dos cifras negativas que dejó noviembre en el mercado laboral: el paro registrado ha subido en 24.841 personas y la afiliación a la Seguridad Social ha caído en 32.832, según los datos publicado este viernes por el ministerio de Empleo y Seguridad Social.

Los datos son negativos porque el paro sube en este mes por primera vez desde 2012. "Es verdad que no había aumentado el paro en los últimos tres noviembres, pero sí lo había hecho en todos los años anteriores la serie histórica", defendió en rueda de prensa el secretario de Estado de empleo Juan Pablo Riesgo, que prefirió destacar que la tendencia decreciente en los inscritos en las oficinas de empleo, ahora en 3.789.283 personas.

Esta vez el inicio de las primeras contrataciones navideñas en comercio y logística no han logrado compensar la caída en otros sectores económicos. Y Riesgo ha añadido como justificación a la subida del paro, un supuesto optimismo respecto a la recuperación económica. "El efecto ánimo ha aumentado en 50.000 personas el numero de desempleados que han reactivado su demanda en las Oficina de Empleo", defendió.

Las malas cifras también se han contagiado a la afiliación media al sistema de la Seguridad Social, que perdió cotizantes por primera vez en este mes desde 2013, contrastando con las ganancias de los dos noviembres anteriores (+5.232 y +1.620 afiliados en 2014 y 2015, respectivamente).

"La prolongación de la temporada turística en Baleares hasta bien entrado octubre ha trastocado toda la estadística este mes de noviembre", ha explicado el secretario de Estado de Seguridad Social, Tomás Burgos, que ofreció también una versión más positiva: "se han sumado 557.437 afiliados en el último año y eso ha supuesto el mayor incremento interanual en un mes de noviembre desde 2005".

El Gobierno apunta a otro motivo como causante del enfriamiento del mercado de trabajo: la finalización de la campaña de vendimia y eso "se nota en Castilla La Mancha y en Castilla y León, donde las labores de recogida han sido intensas", apunta Burgos sobre una labor agraria que, sin embargo, se realiza todos los años por estas fechas. El número total de afiliados al sistema queda ahora en 17.780.524 cotizantes.

"Se esconde una elevada precariedad y parcialidad debido al tipo de empleos que se están creando, fundamentalmente temporales y a tiempo parcial –la mayoría involuntarios-, con remuneraciones más bajas", lamenta el sindicato UGT, que destaca que apenas un 5% de los contratos firmados en noviembre son indefinidos a tiempo completo. Una constante en el mercado laboral español.

Empleo considera, sin embargo, que hay motivo para el optimismo. Apunta que los 1.743.708 contratos registrados en noviembre es "el mayor número de toda la serie histórica en este mes", que suponen un 8,65% respecto a 2015 y que los contratos fijos firmados (154.854), pese a seguir siendo casi residuales frente a los de duración determinada, han crecido un 16,55% respecto a los que se registraban hace un año.

"No se está generando un empleo de calidad, La recuperación económica se está construyendo sobre empleo precario y esto significa pan para hoy y hambre para mañana, a la vez que aboca a millones de personas a la pobreza laboral", insiste UGT.

El sindicato lamenta además que "la protección por desempleo siga cayendo". Los datos de la Seguridad Social así lo refrendan. El gasto en prestaciones de desempleo vuelva a caer (-9,7%) y la cobertura a los parados retome su senda bajista: en octubre solo un 54,1% de los desempleados tenía alguna ayuda del Estado, tres décimas menos que en el mismo mes de 2015. La cuantía media de la prestación contributiva, sin embargo, avanza 1,9 euros hasta los 803,4 euros.