La Costa del Sol se está convirtiendo, cada vez más, en una referencia cultural de primer orden internacional. Más allá del turismo de sol y playa, el destino refuerza sus valores en torno a la cultura, el arte, las tradiciones autóctonas y los monumentos y el patrimonio.

"El poso histórico-artístico de la Costa del Sol ya lo teníamos", ha precisado el presidente de Turismo Costa del Sol, Elías Bendodo, quien ha apuntado que "se trataba de poner en valor todo lo que de cultura y patrimonio hemos aportado a la humanidad; y en esa línea seguimos trabajando".

Al respecto, y como ejemplo, Bendodo ha referido la declaración en el pasado mes de julio del Sitio de los Dólmenes en Antequera (Málaga) como Patrimonio de la Humanidad por la Unesco; "un espacio que desde el momento de la catalogación es, por méritos propios, un estandarte cultural para la provincia de Málaga que debemos de promocionar con orgullo".

Y es que este lugar -que incluye, además de los propios monumentos funerarios, la Peña de los Enamorados y el paraje de El Torcal-, "se viene a unir al renacimiento cultural y museístico de la capital malagueña". Ambos enclaves generan cada vez mayor atracción en el mercado turístico, y se unen a la, ya de por sí, extensa oferta cultural y artística de la Costa del Sol.

Así se ha corroborado en distintos eventos internacionales en donde el destino Costa del Sol ha estado presente para difundir su esencia cultural. En Granada, a mediados de noviembre, tuvo lugar el primer Foro de Turismo Cultural, organizado por Turismo Andaluz y OETs de diversa procedencia, al que acudieron hasta 100 agentes especializados de 30 países distintos y donde la Costa del Sol ha tenido destacada presencia.

Finalizado el foro, se celebraron 'post tours' en las ocho provincias, repartiéndose los profesionales por todos los destinos. La quincena de agentes que optaron por el destino de la provincia de Málaga procedían de España, Reino Unido, Bélgica, Alemania, Rumanía y del sudeste asiático.

Durante el 'post tour', los profesionales pudieron conocer los Dólmenes, la Colegiata de Santa María y la Alcazaba, en Antequera; y también tuvieron oportunidad de ver el nuevo cariz cultural que está adquiriendo Málaga capital en una ruta que incluyó una visita al Centre Pompidou, al Museo Thyssen, al Museo Picasso, a la Alcazaba, así como un paseo por el centro histórico.

De la misma forma, Turismo Costa del Sol participó en unas jornadas profesionales celebradas en Nueva York en la recta final de octubre, y destinadas igualmente a la promoción del segmento cultural. Al evento, en formato 'workshop', acudieron la práctica totalidad de destinos nacionales.

Los compradores, principalmente de Estados Unidos y Canadá, mostraron significativo interés por la Costa del Sol y manifestaron conocer enclaves clásicos como Ronda y Marbella. Además, se pudo comprobar que el despunte cultural de Málaga capital cada vez tiene mayor relevancia en entornos profesionales.