Felipe VI ha presidido este jueves por primera vez la inauguración solemne de una legislatura y lo ha hecho antes unas Cortes divididas frente a la monarquía. La entrada en el Congreso del rey junto a la reina Letizia, la princesa Leonor y la infanta Sofía ha estado seguida de una larga ovación por gran parte de los asistentes pero también se ha podido ver a parlamentarios que se han negado a aplaudir e incluso hay quienes no han acudido al acto.

El evento ha estado precedido por las quejas de los diputados de Unidos Podemos por no haberse respetado la colocación habitual en el hemiciclo, en el que en esta ocasión había un buen número de senadores. Eso ha motivado que entre los asientos se hayan tenido que colocar sillas adicionales para poder albergar a todos los asistentes.

Antes las protestas, los servicios de la Cámara han puesto más asientos en las filas que habitualmente ocupa la formación morada para permitir que pudiese estar en el sitio que normalmente tiene. En declaraciones a los periodistas, Pablo Iglesias ha considerado que "no es serio" que todo el hemiciclo lo ocupasen senadores del PP y ha asegurado que Ciudadanos ha estado de acuerdo con su queja.

Iglesias y sus compañeros de grupo han permanecido sentados con gesto serio mientras el resto se levantaba para ovacionar al monarca, tanto al comienzo de la apertura oficial de las Cortes como al finalizar el discurso real. Los representantes del PNV y del Partido Demócrata Catalán se han puesto en pie pero no han participado en los aplausos. Tal y como habían anunciado, ni Esquerra Republicana ni EH-Bildu han estado en la ceremonia.

Junta a esas protestas simbólicas, el diputado de la formación morada Diego Cañamero vestía una camiseta con el lema "Yo no voté a ningún rey", una decisión que, según ha asegurado, no había consensuado con su grupo."Son cosas mías y punto", ha recalcado. Con el mismo objetivo, los parlamentarios de Izquierda Unida lucían una escarapela con los colores de la bandera republicana en las solapas. Una bandera que el senador de la coalición por Navarra, Iñaki Bernal, ha mantenido desplegada desde el escaño durante buena parte del discurso de Felipe VI.

A las palabras del jefe del Estado les ha seguido un besamanos, en el que los reyes y sus hijas han saludado a los presentes uno a uno. Ningún representante de Unidos Podemos, salvo los dos miembros de la Mesa del Congreso, ha acudido a este acto, el primero de ese tipo para la princesa Leonor y la infanta Sofía, lo que las ha convertido en el centro de atención.

Los miembros del partido que lidera Iglesias tampoco han estado presentes en el desfile militar que ha puesto broche final a esta ceremonia, con la que queda inaugurada oficialmente la XII Legislatura.