La Guardia Civil, en el marco de la campaña para la prevención de robos en explotaciones agrícolas, ha realizado tres actuaciones en las localidades sevillanas de Pilas, Mairena del Alcor y La Campana y se ha incautado de gran cantidad de naranjas que habían sido sustraídas de distintas explotaciones agrícolas de la provincia por ocho personas que han sido detenidas, según ha informado el Instituto Armado en una nota de prensa.

El 28 de octubre, los agentes interceptaron un vehículo que transportaba 350 kilogramos de mandarinas sin documentación, localizando al dueño de una explotación donde habían robado las naranjas, quien denunció haber sufrido el robo tras forzar la valla perimetral de su finca. Por esto, se detuvo a los ocupantes del vehículo, identificados como A.F.F.S. y J.S.R..

Otra actuación de la Guardia Civil se ha saldado con la detención de cuatro personas. Así, los agentes demostraron que el todoterreno que dichas personas conducían cargado de naranjas recién robadas, según se demostró, estaba implicado a su vez en el robo de 5.000 kilogramos de naranjas hacía tan solo tres días antes y que se vendían en un conocido mercadillo sevillano.

Una tercera actuación se produjo cuando componentes de la Guardia Civil interceptaron un vehículo tipo furgoneta tras salir de una finca, el cual estaba cargado de naranjas, de manera que en este caso sus ocupantes tampoco pudieron facilitar documento alguno que certificara su legal procedencia. Se trataba de 400 kilogramos de naranjas de la variedad Navelina.

Una vez puestos en contacto con el dueño de la finca, las reconoció como de su propiedad, informando de que le habían hurtado otros 2.000 kilogramos y 100 cajas para transporte hacía unos días. Los detenidos reconocieron la autoría de ambos hechos.

Los naranjos de donde recolectaron la fruta habían sido tratados con productos fitosanitarios, por lo que se procedió a destruir las naranjas incautadas. Por todo esto, se detuvo a los dos ocupantes de la furgoneta, identificados como D.P.V. y R.S.G..