La visión de los mayores sobre la jubilación es la más cercana a la realidad. Su experiencia puede servir a esa otra parte de la sociedad que aún debe cumplir años hasta llegar a esa etapa de la vida en la que se produce el retiro laboral.

El Estudio Social sobre la Jubilación: Expectativas y Experiencias elaborado por la Fundación MAPFRE recoge entre sus conclusiones que casi el 60% de los encuestados que permanecen en activo y que participaron en el sondeo considera que la situación económica "es una de las razones por las que piensan que su vida de jubilados será peor que la que tienen hoy".

Los que ya dejaron de trabajar y están retirados se han encontrado un panorama bien distinto y su opinión contrasta con la anterior. Así, el 56% declara tener una vida tal y como lo imaginaba; e incluso un 26% señala que es mejor.

La situación económica de los hijos y la propia, junto con la salud están en entre sus mayores preocupaciones. Y el 80% de los participantes en el informe mostró estar de acuerdo en que "la jubilación, tal y como es ahora significa un privilegio, si la comparamos con la que tendrán los jóvenes en un futuro".

Es por eso que el principal consejo que quieren trasladar más de la mitad de los mayores a otras generaciones es que ahorren para llegar a su edad en mejores condiciones. Esta sugerencia la anteponen incluso a la de trabajar o conseguir una estabilidad laboral. Entre las fórmulas sugeridas como vía de ese ahorro a largo plazo está el plan de pensiones; más del 70% de quienes tenían contratado este producto dijo sentirse satisfecho de haber tomado esa decisión.

Para los jubilados el ahorro es un estilo de vida. Sienten que pueden garantizar un futuro mejor a sus hijos y que pueden afrontar de forma óptima su vejez. Un aspecto en el que coinciden personas de todas las edades –y de distinta situación laboral– es la dificultad de comprender el método de cálculo del Sistema de Pensiones Público, ya que depende de las situaciones personales.

"La dificultad de conocer y de lograr entender los criterios de cálculo para determinar la cuantía final de la pensión puede incidir, entre otros factores, en que los ciudadanos no se interesen en realizar ninguna consulta para conocer cuál será la prestación en la jubilación, por lo menos hasta el momento en el que ven próxima la llegada de esta etapa, que es cuando mayoritariamente afirman realizar este tipo de averiguación", explican desde la Fundación.

En términos cuantitativos obtenidos a través del estudio, se detectó que casi siete de cada diez ciudadanos entre 50 y 64 años no ha realizado una consulta para saber cuánto percibirá por su pensión.

Los encuestados también coinciden en contemplar la jubilación como una "recompensa justa y merecida al esfuerzo realizado, a la que se añade, generalmente, la ventaja de contar con plena capacidad física y mental para disfrutarla. Pero pensar en la jubilación nos cuesta".

En este sentido los españoles ocupamos puestos atrasados respecto a otros países de nuestro entorno. "Según los últimos datos de Inverco, las familias españolas reservan únicamente el 10,4% de su renta anual frente al 17,8% de las suizas. También quedamos por detrás de las noruegas (16,4%), las portuguesas (12,6%) o las alemanas (16,4%)", desvela el estudio de la Fundación MAPFRE. Estas diferencias se explican parcialmente por los salarios y la crisis económica. Sin embargo, en España hay más tradición, por ejemplo, de invertir en vivienda que en un plan de pensiones.