El abogado del denunciante, Manuel Huertas, ha asegurado que la denuncia se presentó este pasado jueves, apuntando que "queremos que se llegue hasta el final para que se detenga al responsable". En el escrito, se pide que se requiera al Grupo de Delitos Informáticos de la Policía Nacional a investigar quién pudiera ser el autor de los hechos denunciados.

Según la denuncia, a la que ha tenido acceso Europa Press, los hechos podrían ser constitutivos de los delitos de injurias y calumnias graves hechas con publicidad, amenazas, descubrimiento y revelación de secretos y usurpación del estado civil.

En el escrito se explica que el denunciante tenía dos perfiles abiertos sin fotografía para preservar su identidad, cuando el día 21 de este mes de octubre comenzó a recibir llamadas y mensajes de amigos y conocidos "alarmados de que en dichas aplicaciones se encontraban abiertos y operativos" tres perfiles con foto de su rostro "tomada sin su consentimiento" de otra red social.

Además, a modo de presentación, según la denuncia, adelantada por diario 'SUR', se indicaba "soy VIH", circunstancia que es verdad, aunque "sólo el entorno más cercano e íntimo" del joven lo conocía; de hecho, "ni con su familia más directa había querido compartir tal información" para "evitar un innecesario sufrimiento a sus padres".

También se incluían en dichos perfiles manifestaciones de tipo sexual, que son falsas igualmente, y "se le atribuye falsamente la comisión de un delito contra la salud pública cuando haciéndose pasar por él, en abierto y dirigido a una generalidad de usuarios, afirma 'vendo tema y lo que quieras'.

El denunciante sospecha, según la denuncia, que detrás de estos hechos podría estar alguna persona "movida por enemistad o ánimo de perjudicar muy seriamente su consideración social" o podría "tratarse de algún otro paciente de la Unidad anti VIH" del hospital al que asiste. El joven trató de ponerse en contacto con el usuario de esos perfiles, pero le bloquearon.

En el escrito, se indica que todo esto ha creado un "enorme desasosiego, ansiedad y profunda tristeza" en el denunciante, "marcado de por vida en una sociedad donde la serofobia es causa de rechazo y estigma social"; así como "un malestar innecesario y gratuito" en su entorno laboral y familiar.