A través de un comunicado de prensa, el Sergas manifiesta que las declaraciones de la exdirectiva "vienen a confirmar el proceso que seguía el Sergas en la autorización de este tipo de fármacos, en el que el proceder se desarrolló siguiendo estricta y rigurosamente los cauces establecidos para estos casos".

El Sergas espera que esta nueva declaración "sirva para despejar cualquier mínima duda que pudiera quedar sobre el correcto proceder de la Administración sanitaria y de sus profesionales".

Asimismo, espera también que "la resolución de este caso llegue a la mayor brevedad posible" y mantiene su "compromiso de máxima colaboración con la justicia en todo aquello que se le requiera".

DECLARACIÓN DE LA EXDIRECTORA

La exdirectora de Procesos Asistenciales del CHUS aseguró este jueves en sede judicial ante Andrés Lago Louro, en calidad de testigo, que comunicó "personalmente" a los cargos del Sergas investigados por supuestos retrasos en los tratamientos contra la hepatitis C la "urgencia" de tres de los casos que figuran en la causa, aunque ha ratificado que ella, desde su posición, no podía hacer nada por estos tratamientos "al margen de la subcomisión".

Su comparecencia deriva de la declaración tomada en el mes de abril a los dos investigados por estos hechos -el exdirector de Asistencia Sanitaria Félix Rubial, y la subdirectora de Farmacia, Carolina González-Criado-, que aludieron a la responsabilidad de esta directiva en relación a tres de los casos investigados y dejaron entrever que no había empleado un procedimiento de urgencia para el tratamiento de estas personas, que finalmente fallecieron.

Sin embargo, ante el juez, la mujer ha "puesto en evidencia" que ella "no tenía capacidad, presupuesto ni medios para actuar autónomamente sin la autorización de la subcomisión" de farmacia que debía autorizar el tratamiento, según la información dada por el abogado Pedro Trepat, que representa a la acusación ejercida por la Plataforma de Afectados por la Hepatitis C.