Bungie, el estudio que ha creado en colaboración con

Microsoft la exitosa saga de videojuegos Halo, ha anunciado que

volverá a funcionar como compañía independiente, aunque seguirá colaborando estrechamente con el gigante informático.

Microsoft

mantendrá una pequeña participación en la nueva compañía, y seguirá publicando las nuevas entregas de Halo que puedan producirse en el futuro. Bungie, en todo caso, anuncia ya su intención de no centrarse únicamente en la producción de títulos par Xbox 360, y lanzará juegos también para otras plataformas.

La empresa de Bill Gates

compró Bungie en el año 2000, en un momento en el que preparaba el lanzamiento de la primera versión de su consola Xbox y necesitaba impulsar sus línea de videojuegos.

Siete años después, la tercera versión de Halo se ha convertido, según la compañía informática,

en el videojuego que más ha vendido en sus primeros días en las tiendas. En tan sólo una semana (el juego llegó a las tiendas de todo el mundo el pasado miércoles)

se han comprado unidades de Halo 3 por valor de 300 millones de dólares, unos 212 millones de euros.

Un jugoso pastel del que Microsoft no quiere desprenderse.

Mantendrá la propiedad intelectual del juego, al tiempo que apoya "el deseo de Bungie de volver a sus raíces independientes", según ha explicado el presidente de la división de juegos de la compañía informática.