El presidente de Francia, François Hollande, la canciller de Alemania, Angela Merkel, y el primer ministro de Italia, Matteo Renzi se han reunido este lunes en la isla italiana de Ventotene para relanzar la Unión Europea tras la salida de Gran Bretaña y analizar los desafíos que plantea la inmigración y el terrorismo.

El escenario de la reunión fue esta isla de claro valor simbólico para Europa, ya que allí se firmó en 1941 el llamado Manifiesto de Ventotene, cuyo título es Por una Europa libre y unida, un documento visionario y precursor de la UE redactado por los italianos Altiero Spinelli, Ernesto Rossi y Eugenio Colorni. La reunión sucedió a la que los tres mandatarios mantuvieron el pasado junio en Berlín tras el brexit y en la definieron las líneas maestras que debe seguir la Unión si no quiere fracasar.

Una de las prioridades ha sido la de comunicar seguridad y confianza en la UE tras la marcha de Gran Bretaña. En este sentido, Matteo Renzi, afirmó que la Unión Europea "no está acabada", pese a la decisión británica de romper con el bloque comunitario, al tiempo que subrayó que "Europa no es el problema, puede ser la solución". "Muchos pensaban que después del brexit Europa estaba acabada, no es así", remarcó.

Para el primer ministro italiano la UE tiene por delante un camino que recorrer en el que los países miembros "deben trabajar para lograr una mayor integración en el sector de la defensa y de la inteligencia", al tiempo que afirmó que "Europa es la oportunidad más grande que tienen las nuevas generaciones".

Renzi quiso también que se afrontara su proyecto Migration Compact, que consiste en conceder fuertes ayudas a los países africanos que son origen o tránsito de refugiados.

También se abordó la seguridad interior y exterior tras los últimos atentados yihadistas en Europa y para ello se analizaron varios proyectos, como unas fuerzas armas europeas para emplear en los conflictos o la creación un cuerpo europeo de guardia fronteriza.

François Hollande, afirmó al respecto que es necesario "garantizar la defensa de Europa" y "controlar las fronteras" y subrayó que en la Unión Europea existen tres dimensiones por abordar, como son la seguridad, la economía y las ayudas a los jóvenes.

"Es necesaria una mayor cooperación europea (en relación a la gestión de la crisis migratoria). La Guardia costera italiana por sí sola no puede controlar los confines marítimos", dijo Angela Merkel, al tiempo que afirmó que "la cooperación con Turquía es esencial, de otra forma no podemos vencer la lucha contra los traficantes de seres humanos".

Además, se puso sobre la mesa el proyecto de Estrategia Global sobre Política Exterior y de Seguridad de la Unión Europea presentado, sin que obtuviera demasiado atención por los Estados, por la alta representante, Federica Mongherini, pero que tras los últimos atentados podría cobrar más interés.

Los mandatarios llegaro a la isla alrededor de las 17.00 hora italiana (15.00 GMT) y tras un paseo y la visita a la tumba de Spinelli se trasladaron al portaaviones Garibaldi de la Marina italiana para la rueda de prensa prevista a las 18.00h. La reunión se esta celebrando en el portaaviones durante la cena temprana ofrecida por el Gobierno italiano y que está previsto que concluya a las 21.00 horas.