Rupert Grint, el actor que da vida a Ron Weasley en la saga cinematográfica Harry Potter, tendrá que pagar una multa de un millón de libras (1,16 millones de euros) por evadir impuestos.

Según el diario británico The Guardian, el intérprete, de 27 años de edad, presentó una apelación contra la sanción alegando que él no controlaba el estado de sus finanzas, tarea de la que se encargaban su padre, Nigel Grint, y un contable. No obstante, el juez no ha considerado válido su argumento.

En 2010, Grint presentó cuentas de un periodo inferior a 12 meses, coincidiendo con la subida de impuestos de Reino Unido del 40% al 50% para rentas mayores a 150.000 libras.

La declaración, que recogía las ganancias del actor desde el 31 de julio de 2009 hasta el 5 de abril de 2010, incluía su sueldo en el rodaje de las dos últimas entregas de Harry Potter, saga con la que el actor ha embolsado cerca de 29 millones de euros.

Si esa contabilidad se hubiese declarado válida, el actor se podría haber ahorrado un millón de libras, es decir, la subida del 10% que habría evitado. No obstante, la juez ha considerado que el móvil de los asuntos financieros fue claro, por lo que Grint tendrá que abonar esa cantidad.

Las autoridades financieras han aclarado que aunque tenía derecho a variar sus cuentas, las condiciones legales no consideran dicho cambio válido.