Según informa la Jefatura Provincial en un comunicado, las investigaciones se iniciaron tras una denuncia por la sustracción en un domicilio de diversas joyas, mayoritariamente de oro, que se encontraban guardadas en una caja de zapatos escondida en el dormitorio, y de varios manteles bordados a mano valorados en 600 euros.
Los denunciantes se percataron además de la falta de un juego de llaves del domicilio y de que las únicas personas ajenas que entraban a la vivienda eran las asistentas de una empresa de servicios de ayuda a domicilio.
A partir de estos primeros datos, los agentes reunieron suficientes indicios para poder atribuir la presunta autoría de lo sucedido a una mujer que habitualmente trabajaba en la vivienda como asistenta de una empresa de servicios de ayuda a domicilio y procedieron a su localización y detención.
Tras verificar ciertos extremos de la investigación, pudo comprobarse que la detenida había realizado numerosos contratos de venta de joyas de las que había hurtado en varios domicilios en los que trabajó como asistenta, habiéndose localizado la mayor parte de ellas. Según la Policía, el valor de las joyas sustraídas en cuatro hechos delictivos diferentes podría ascender a más de 15.000 euros.
La detenida fue trasladada a las dependencias policiales y una vez concluidas las diligencias pasó a disposición de la autoridad judicial competente de Granada.
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