El cantante canadiense Justin Bieber no ha dudado en disfrutar del cine con la privacidad que suelen disfrutar las personas anónimas, aunque con mucha menos compañía. Bieber alquiló un teatro completo de Times Square (Nueva York) el lunes por la noche para ver la película La vida secreta de las mascotas.

Sin embargo, el cantante no estaba solo, puesto que le acompañaron unos diez amigos, según ha publicado TMZ, que ha calculado que el capricho podría haberle salido al cantante por entre 750 y 3.000 dólares.

Justin Bieber no dudó en colgar en instagram una foto de su sesión privada de cine, con los pies encima de la butaca de delante y el resto de la sala vacía.

Se dio la curiosa casualidad de que en uno de los cortes publicitarios antes de la película aparecía la modelo Chantel Jeffries, expareja de Bieber.

Quizá el joven siga en la línea que le acompaña hace tiempo de sentir agobio por la fama y por la pasión de sus fans, la misma que le llevó a decir en un concierto hace pocos días: "¡Intentad no darme ningún sombrero o lo que sea que me vayáis a lanzar al escenario, porque probablemente no quiera esa mierda!".

Y aunque pidió disculpas poco después, está claro que Bieber prefiere estar solo.