La torre Andreu de Barcelona, conocida popularmente como La Rotonda, abrirá sus puertas en octubre para mostrar su restauración, ha informado en rueda de prensa este jueves la compañía propietaria del inmueble, el Grupo Núñez y Navarro, que prevé finalizar las obras en septiembre.

La rehabilitación y ampliación del inmueble obra del arquitecto Adolf Ruiz Casamitjana, que ha tenido un coste de 70 millones de euros, ha permitido recuperar su aspecto modernista original, rescatando y protegiendo el volumen primigenio, las fachadas principales y el interior recuperable de la construcción inicial, ha explicado la gestora cultural de la obra, Txell Jubany.

La intervención supone retornar al edificio el aspecto planeado inicialmente por Casamitjana a partir del encargo del doctor Salvador Andreu, por lo que Barcelona podrá "recuperar para las próximas generaciones una joya histórica símbolo de la ciudad", ha añadido Jubany.

Este jueves se ha descubierto la lona que cubría el edificio y también está previsto que en los próximos días se ilumine la fachada, ha explicado la gestora cultural de la obra, que ha durado seis años y ha dedicado una atención especial al templete que corona el edificio.

La compañía, que tiene previsto finalizar el área de nueva construcción del inmueble en los próximos meses, destinará las cinco plantas a oficinas, los locales de la planta baja a comercios y también habrá un aparcamiento, aunque hasta octubre no está previsto que empiece la comercialización de los espacios.

A las jornadas de puertas abiertas para visitar el edificio reformado y ampliado en octubre también se "ha invitado a las asociaciones de vecinos de Sant Gervasi", han explicado fuentes de la compañía; las entidades del barrio pedían que se destinase a equipamientos.

El edificio, que en 1976 fue declarado Monumento Histórico-Artístico con carácter local en la ciudad de Barcelona, tiene como partes protegidas la fachada de la calle y el templete-mirador del edificio original, es decir, el construido en 1906, que se ubica en el cruce de l'Avinguda del Tibidabo y el Passeig de Sant Gervasi.

Así, la restauración, que ha ido a cargo de Alfredo Arribas Arquitectos Asociados, ha respetado "íntegramente" tanto las especificaciones del Plan Especial del Patrimonio como las del Plan General Metropolitano, han informado fuentes del Grupo Núñez y Navarro.